Recientemente las noticias están llenas de información respecto a plataformas (Facebook o WhatsApp) que tienen fallas y que permiten invadir la privacidad de los usuarios, pero también hay casos de empresas a las que se les acusa de ayudar a sus gobiernos a espiar (Huawei). ¿Qué está pasando? ¿Quién nos espía?

La triste realidad es que ha iniciado una guerra comercial y de espionaje en donde los principales actores —Estados Unidos (EU) y China— están moviendo sus fichas para lo que se antoja como una nueva a guerra mundial: la cibernética.

En el Congreso de EU se reveló que una empresa de seguridad privada (LookingGlass Cyber Solutions), contratada por el Departamento de Seguridad Interior, estaba monitoreando y espiando a todos los que se congregaban para protestar contra la política de separación de familias migrantes ilegales que llegaban a ese país. El espionaje aconteció en más de 600 protestas, incluidas las realizadas en la Ciudad de México. Esta práctica sobre todo se hacía vía las cuentas de Facebook a través de las que se organizaban los manifestantes y sus contactos. Para ello, habrían usado, según reporta la publicación especializada The Intercept, un sistema denominado Cyveillance.

También este mes, nos enteramos que el espionaje no sólo se hace vía las cuentas de Facebook que usamos, ahora también se están utilizando las cámaras viales, las de seguridad y hasta las privadas para seguir nuestros movimientos, paso a paso, mediante reconocimiento facial. De hecho, la ciudad de San Francisco recién puso en vigor reglamentación para impedir el uso de esa tecnología en esa localidad y proteger así a sus ciudadanos. Esto, luego de que se hiciera público que en EU se están monitoreando todo tipo de eventos con cámaras e inteligencia artificial (I.A.), para seguir a sus ciudadanos y visitantes. De hecho, el primer evento masivo que usó esta tecnología en desprevenidos fanáticos, fue el Super Bowl XXXV de 2001.

Ahora, también se escanea con I.A. a todos los que entran al Madison Square Garden, en NY, y pasa igual en los aeropuertos estadounidenses y en muchos otros lugares.

Si en EU hay contrapesos, revisiones judiciales y notas periodísticas para defender la privacidad de los ciudadanos de las 50 millones de cámaras instaladas, en otros países como China, en donde hay 200 millones de cámaras, éstas se usan sin restricción alguna.

En el país asiático, los avances tecnológicos ya permiten que la policía use lentes que reconocen a todos los que pasan frente a ellos y le indiquen a quiénes hay que arrestar. Así siguen los pasos de 1.4 mil millones de ciudadanos. Desde luego, esto es una valiosa herramienta contra la inseguridad, pero también se usa para perseguir a minorías no afines al régimen. Tal es el caso de los Uighurs, mayormente musulmanes, a quienes se vigila por su perfil racial y religioso.

El año pasado, el gigante de las telecomunicaciones Microsoft llamó a regular el uso de la I.A. en EU, algo que no se ve que vaya a suceder. Al contrario, pasamos de la línea telefónica “colgada”, a que todas nuestras comunicaciones, redes sociales y hasta nuestro andar esté siendo vigilado. Tiene ventajas, pero también muchos riesgos. Será nuestra realidad, no cabe duda. Ante ello es importante tener conciencia de que información subimos en las redes sociales y en equipos ‘inteligentes’.

Cambiando de tema:
*El INE rebasado por la 4T-TV: El debate entre los tres aspirantes a la gubernatura de Puebla no fue transmitido por Televisa ni por TV Azteca. Las televisoras privadas no tienen obligación de llevar los debates entre candidatos a las gubernaturas, pero generalmente lo habían hecho. ¿Qué cambió?

Los monitoreos realizados a las entidades con elecciones locales, reportan que los canales de la TV pública gubernamental no transmiten los tres minutos de spots a que están obligados a llevar cada hora, de cada mañana. En particular, decidieron incumplir la ley para no interrumpir las mañaneras desde Palacio Nacional.

Las conferencias mañaneras son un ejercicio que a otros Presidentes el INE nunca les hubiera permitido realizar durante procesos electorales. Ahí está el precedente que el IFE (hoy INE) le hizo a Felipe Calderón, a quien, por dar un solo mensaje sobre inseguridad en cadena nacional, en el proceso electoral de 2010, se le imputó responsabilidad y se le sancionó por violar la Constitución.

Pero ahora, las conferencias de prensa presidenciales se hacen y se ven, cada mañana, en entidades con elecciones. Eventos llenos de propaganda oficial. El INE no hace nada. También, se afecta la pauta de spots de los partidos y el INE no actúa. Además, de que la equidad en la cobertura de los medios públicos está trastocada y la autoridad electoral guarda silencio.

Desde luego, la materia electoral tiene muchas reglas absurdas que deberían ser revisadas. Como el inhibir las ruedas de prensa de cualquier funcionario público, incluido el presidente de la República. Pero al día de hoy, esto es la ley y extrañamente el INE ha sido laxo en aplicarla. Que el INE midiera a la TV (y radio) privada con la misma vara con la que mide a la 4T-TV, evitaría tratos diferenciados y generaría un piso parejo para las elecciones. Además de mejorar el ambiente para cooperar en los importantes esfuerzos que hacen los funcionarios electorales para que se ejerza un voto informado.

Twitter: @JTejado