Esta semana es la más oscura en la historia de las Chivas, por las derrotas en el Mundial de Clubes y el papelón que hicieron, al convertirse en el peor equipo de la Concacafen este torneo.

Hace algunos años, la familia Vergara quería vender al club y —en aquel momento— pedía 800 millones de dólares en paquete con el estadio, aunque está clarísimo que esto hoy en día estaría lejos de poderse realizar, por el simple hecho de que se ha devaluado de una forma importante en los últimos meses.

Una institución como Guadalajara no puede seguir en lo mismo. Fue un año de terror, en el que sólo consiguió una victoria como local y además ha perdido credibilidad ante su afición.

Lo más preocupante que está sucediendo es el espionaje que hay sobre los futbolistas que siguen teniendo contacto con Matías Almeyda, el cual es comandado por José Luis Higuera, algo que provoca molestia en el vestidor.

A su regreso de Abu Dabi, Mariano Varela fue muy claro al decir que su director técnico ya no tendrá pretextos, ya que hoy han ido en busca de nuevos futbolistas que parecen ser buenas opciones para intentar sacar rápido a este plantel del hoyo en el que está metido.

Aunque hay que recordar que la directiva se ha dado a la tarea de hacer las cosas mal últimamente, porque no se nos olvida la forma en la que despidieron a su anterior técnico, quien en dos años y ocho meses, los llevó a siete finales, dándoles cinco títulos y regresándolos a los primeros planos, así que —aún con estas contrataciones— el tiempo será el que se encargue de darles o no la razón a personajes de pantalón largo que, en estos días, no tienen la aprobación de la mayoría.

@Gusocalderon

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