Aumentarán los penaltis de manera considerable, sobre todo cuando un jugador habilidoso esté cerca del área y con un defensor postrado intentando que no pase, o bien quitarle el balón. Con un poco de talento frente al zaguero, habrá sanción inmediata, una valoración que seguramente fue tomada en cuenta, pero desechada por la International Board, organismo que anunció las nuevas reglas del futbol, entre las que está que todos los contactos con la mano serán falta.

Esta modificación entrará en vigor la próxima temporada. Se quita el concepto en el reglamento de que tocar el balón con la mano “implica la acción deliberada de un jugador de tocar el balón con la mano o el brazo”; es decir, entra el criterio arbitral, algo que seguramente la International Board quiere eliminar, porque este concepto siempre ha puesto en problemas a las comisiones arbitrales en todo el planeta. Lo que para uno es deliberado, para otro no lo es. Así de dramático es.

Pero también la International Board debería ser más específica en el caso de las manos. Según sus textos explicativos, las cosas están así: no se tomará en cuenta la intención de las manos dentro del área si se anota un gol; será invalidado, sin importar si es accidental o no.

Eso es muy claro. Pero existe más explicación en lo que respecta a la mano: todas serán calificadas como intencionales, por lo que se marcara falta en caso de que se cometa por un jugador a la ofensiva. Mientras que a la defensiva se marcara penalti, excepto si rebota el balón en el defensa, sin que éste trate de ampliar su cuerpo, en la inercia de las manos cuando va al suelo (en una barrida, por ejemplo) y siempre y cuando tenga pegados los brazos al cuerpo. Es decir, lo dejan muy abierto, algo peligrosísimo para silbantes con distintos criterios.

El organismo rector de las reglas del futbol funciona de la siguiente manera: Son ocho votos para hacer cambios en reglas, formados por cuatro representantes de la FIFA y cuatro de las asociaciones de Reino Unido (Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y Gales). Para que se apruebe un cambio o una nueva regla, deben tener unanimidad los de la FIFA y por lo menos dos de los cuatro votos británicos.

Además de la mano, hay cambios en otras reglas. Se elimina el rechace de los penaltis: si el portero, el poste o el travesaño desvía la pelota, se concederá saque de arco. Con esto, bajará considerablemente el número de goles por penalti. Otro cambio es que los futbolistas podrán disputar la pelota dentro del área una vez que el arquero la pone en juego.

Uno de los cambios visuales más trascendentes es que el árbitro le mostrará tarjeta amarilla y roja a los entrenadores y cuerpos técnicos.

Y otras más: cuando un jugador sea cambiado, ya no será necesario que salga por la mitad del campo. También protegerán a los futbolistas de las barreras defensivas, ya que ahora los rivales tendrán que estar a un metro.

No están mal los cambios, lo que sigue siendo un galimatías es que los árbitros inventen pese a la tecnología, como sucedió el viernes con Fernando Hernández en el Monarcas vs. América, porque lo importante no es modificar el reglamento, lo que deben hacer es aplicarlo.

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