Sólo existen tres equipos con menos puntos que el Guadalajara en el actual campeonato.

Son ocho partidos sin victoria para los ahora dirigidos por Tomás Boy, quien parece haber estado más preocupado por cómo encontrar excusas  que por intentar cambiarle la cara a este plantel.

Son dos años en los que no han clasificado a la Liguilla y tal parece que a muchos de los jugadores que estuvieron en aquel brillante momento con Matías Almeyda se les olvidó lo que significa representar a esta institución. Es una pena lo que han mostrado en este año, jugando en cada jornada como equipo chico.

Está claro que el menos culpable es el DT. Primero fueJosé Cardozo y ahora Boy, pero las malas decisiones que ha tomado la directiva hoy tienen hundido a este club. Si bien, en el inicio del torneo parecía haber acertado con las contrataciones de refuerzos, no acertó en el perfil de técnico que pudiera regresarle esa ilusión que había logrado anteriormente con el argentino, al cual corrieron de mala manera.

En este equipo se necesita analizar perfectamente el perfil del entrenador que llevará los hilos del plantel, además de poner mano dura y correr a muchos de los futbolistas que viven hoy en el conformismo.

Está claro que las críticas cada día son menos fuertes para una escuadra que parece estarse acostumbrando a vivir entre las peores del campeonato. Ahora, está metido en serios problemas de descenso para el año futbolístico que viene y no se ve cómo, con estos directivos de medio pelo, puedan salir rápidamente.

José Luis Higuera se tendría que largar del Rebaño y dejar que alguien venga a corregir las malas decisiones tomadas en estos últimos años.

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