Cruz Azul regresó al liderato, pero de manera momentánea, ya que todavía espera el resultado de Santos en Querétaro.

La Máquina derrotó 2-1 a lo Pumas, para cortar una racha de tres derrotas consecutivas en calidad de visitante —primera victoria fuera del Estadio Azteca desde la Jornada 2— , y es el primer equipo que llega a los 30 puntos en el Apertura 2018.

Los cementeros podrían caer al segundo sitio de la tabla si los Guerreros vencen a los Gallos Blancos más tarde. Cualquier otro resultado, los dejará en el primer lugar a dos fechas de que concluya el torneo regular.

Ciudad Universitaria sigue sin pesar a favor de los Pumas, que apenas cosechan un par de triunfos en su casa y hoy se terminó una racha de ocho juegos sin derrota (cuatro ganados) en el certamen.

Édgar Méndez abrió los cartones al minuto 15. El español recibió un centro perfecto de Adrián Aldrete, desde el costado de la izquierda, y picó el balón —ante la mala marca de Alan Mendoza— para dejar sin posibilidad a Alfredo Saldívar.

El ibérico aprovechó que La Máquina atacaba la portería norte del estadio Olímpico Universitario y fue a celebrar el tanto con la afición visitante, todavía explosiva por el título copero de la semana.

Con Cruz Azul arriba en los cartones, el partido se quebró en medio campo. Pedro Caixinha mandó al terreno de juego un parado táctico distinto a lo acostumbrado, con tres volantes (Iván Marcone, Javier Salas y Rafael Baca) para ganarle el esférico a los felinos en esa zona del campo, en lugar de su clásico 4-2-3-1. Roberto Alvarado arrancó en la banca.

Después de 30 minutos, David Patiño, timonel auriazul, no aguantó que sus jugadores no tuvieran la pelota y modificó su esquema. Mendoza, cómplice en el gol de Méndez, fue sacrificado y su lugar lo tomó Matías Alustiza, aplaudido por la afición en el Pedregal. Ignacio Malcorra ocupó la banda izquierda y los Pumas se alinearon igual que La Máquina con un 4-3-3.

Con el “Chavo”, los auriazules encontraron un mejor equilibrio, con peligro en el costado derecho, comandado por Pablo Barrera y Alan Mozo. Los canteranos mandaron un par de centros al área de Jesús Corona que fueron desaprovechados por los sudamericanos Felipe Mora y Carlos González.

Los Pumas se fueron al frente en el arranque del segundo tiempo. Malcorra no necesitó defender tanto y provocó peligro por la izquierda. Alustiza midió las habilidades de Corona con disparos de larga distancia. Mora y González complicaron a los centrales en  el área. Pero el gol no caía.

Martín Cauteruccio hizo el segundo de La Máquina, pero fue anulado por fuera de lugar; el Olímpico Universtiario ya se había callado y no por la fría tarde en la Ciudad de México. Patiño todavía se atrevió más. Dejó a tres hombres en la defensa, con Barrera y Malcorra como carrileros y, en punta, a lo mismos sudamericanos. Mucho empuje pero poca contundencia.

Andrés Rentería, quien entró de cambio por Cauteruccio, aprovechó un rebote en el área para cruzar a Saldívar y hacer el 2-0.

La reacción de los Pumas llegó tarde, en un centro desde la esquina, rematado por Luis Fernando Quintana. A pesar de que el árbitro Jorge Isaac Rojas agregara cinco minutos extra y expulsó a Aldrete por una fuerte barrida sobre Barrera, los universitarios no lograron firmar la cruzazuleada.

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