Nuevas quejas se generan en contra de la directora del Hospital General del ISSSTE en San Luis Potosí, Rebeca Hernández Jiménez. El personal del nosocomio denunció de manera anónima que se les está obligando a asistir de manera ordinaria sin tomar en cuenta el riesgo al que se exponen al acudir sin las debidas precauciones ante la contingencia que se vive actualmente. Los trabajadores mencionaron que parte del equipo médico son personas de la tercera edad, quienes son parte del sector vulnerable a contraer el Covid-19.

“En los servicios de salud están contratando personal suplente, quienes no tienen servicio médico, se arriesgan a contraer una enfermedad, aparte de que no les pagan las quincenas, así como el material y medicamentos son precarios. El desabasto es muy fuerte”, señaló uno de los trabajadores afectados.

Además, expusieron que existe irresponsabilidad al no establecer los filtros de seguridad necesarios para el ingreso de los derechohabientes al acudir a realizar trámites. Al ver solas las oficinas asisten y ponen en riesgo al personal administrativo, además de que los sindicatos no están realizando gestiones para la protección de los trabajadores, tanto los de confianza, como los de base.

De acuerdo con el señalamiento del personal, aseguraron que existen múltiples servicios administrativos en los que no es necesario que estén abiertos al público,  y ante la falta de control por parte de la dirección del hospital, se está poniendo en riesgo un gran porcentaje de trabajadores, quienes tiene como única opción, irse a sus domicilios a cuenta de vacaciones.

“¿Por qué no deja a los jefes de las áreas necesarias administrativas? Quienes toman las decisiones son ellos, hay que considerar que como ven abierto al público con todo el personal,  los derechohabientes deciden ir. Si estuviera cerrado ni ellos tendrían a que salir y ponerse en riesgo tanto ellos, como a sus familias y personal que les rodea o tienen contacto directo en ventanillas”, señalaron.

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