Los celos, el egocentrismo y la falta de personal en las corporaciones policíacas en algunas zonas de la entidad convierte a las instituciones educativas en vulnerables ante la delincuencia, por lo que legisladores sugieren mayor coordinación entre las dependencias de seguridad o la creación de una policía comunitaria para mantener vigilados los centros educativos.

Esto tras develarse que hay escuelas que han sido objeto de robos, no una sino hasta en tres ocasiones en el periodo de un mes.

Edgardo Hernández Contreras, diputado del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) con experiencia en la procuración de justicia, sostuvo que le hace falta coordinación a los tres niveles de gobierno pues “ninguno se pone de acuerdo, todos trabajan con celos, con egocentrismo, menos para la sociedad”, por lo que consideró necesario que asuman su rol, “no se vale, hay más que un antro, un bar y no se vale que roben computadoras y saqueen las escuelas”, consideró que en el resguardo que se debe de dar a estos sitios el “gobierno del estado está fallando, Seguridad Pública está fallando en no ponerse de acuerdo, las estrategias para ese tema no están llegando a una conclusión efectiva para salvaguardar los planteles educativos”.

A su vez, Mario Lárraga Delgado, legislador representante del extinto Partido Encuentro Social y profesor de formación, señaló que se debe de pugnar para que haya iluminación en las inmediaciones de las instituciones educativas y que los padres y madres de familia colaboren con la vigilancia, puntualizó que “robar una escuela es de los crímenes más grandes que pudiera haber, pues hace falta todo lo que hay, pues ha sido comprado con el sacrifico de los padres de familia o de los propios maestros. Hace falta no tener patria, ser una apátrida para robar una escuela una clínica”, que son instituciones de las que incluso dependen vidas humanas.

maria.medrano@clabsa.com.mx

apl

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