Las comisiones unidas de Capacitación y Organización Electoral del Instituto Nacional Electoral (INE) dieron ayer luz verde a un plan piloto para facilitar el voto de pacientes hospitalizados este 1 de julio.

La meta es instalar casillas especiales en un hospital en cada una de las 32 entidades federativas, en donde se recibiría el sufragio de ciudadanos que no pueden ir a su casilla ordinaria; el voto de familiares que están a su cuidado y el de personal de guardia, médicos y enfermeras.

De acuerdo con las estimaciones del INE, en el mejor escenario podrían sufragar en este tipo de casillas más de 14 mil ciudadanos, lo que de acuerdo a la votación nacional que podría emitirse llegaría a representar 0.025% del total, si la participación ciudadana llega a 64 % de los mexicanos en Lista Nominal de Electores.

El número de votos de este plan “será intrascendente, pero avanzaremos mucho en garantizar derechos”, planteó el director ejecutivo de Organización Electoral, Miguel Ángel Solís Rivas, quien detalló que el plan piloto tendría costo cero e implicaría las medidas sanitarias que establezcan las autoridades de salud.

Gonzalo Rodríguez Miranda, director de Planeación y Seguimiento del INE, presentó el estudio de viabilidad y explicó, que de acuerdo con las pláticas sostenidas con el sector salud, el plan es operable.

Los consejeros Pamela San Martin y José Roberto Ruiz Saldaña plantearon que es loable ampliar derechos y nadie puede oponerse.

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