Uno de los medicamentos cuyo nombre se ha escuchado más debido a su implementación en tratamientos es el paracetamol, compuesto del fármaco p-aminofenol.

Este fármaco se encarga de aliviar dolores leves o moderados, motivo por el cual está presente en varias recetas y se emplea para combatir distintos malestares.

Durante el proceso de ingesta, el analgésico acetaminofén, como también es conocida esta medicina, se metaboliza con vigorismo su función en las paredes del hígado. Después de cumplir su proceso analgésico es eliminado por medio de la orina.

La dosis que se emplea depende de la edad del paciente así como de la enfermedad que presente, aunque un promedio en adultos es de 0.5-1 repetido cada 4 o 6 horas, mientras para los infantes es de 20 a 30 mg diarios en dosis divididas.

Su uso genérico es amable con el sistema inmunológico de quienes lo consumen, pues son pocos los inconvenientes que provocan aunque la Food and Drug Association (FDA) ha asegurado que puede haber casos en que el medicamento produzca hipersensibilidad o reacciones dermatológicas.

La sobredosis del medicamento puede orillar a una enfermedad hepática tóxica que afecta de manera directa al hígado y puede traer consecuencias como potencializar la posibilidad de muerte. Ante esto se realiza un lavado de estómago en el paciente para desembarazar los restos de medicamento que pudieran permanecer en el estómago.

Ante la pandemia del coronavirus , la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sugerido usar el paracetamol en lugar del antiinflamatorio ibuprofeno, pues este último podría agravar la salud de pacientes.

"Nuestros expertos están investigando esto para poder dar futuras pautas, pero mientras tanto recomendamos usar paracetamol y no ibuprofeno al automedicarse", señaló el portavoz de la OMS Christian Lindmeier en rueda de prensa.

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