Más Información
Dedicar demasiado tiempo viendo televisión puede aumentar los niveles de ansiedad y depresión en niños de dos años, concluyó un nuevo estudio.
Lo mismo puede pasar si pasan muchas horas usando videojuegos y teléfonos inteligentes.
Además de disminuir la curiosidad, el autocontrol y la estabilidad emocional en niños y adolescentes que pasan sólo una hora al día frente a la pantalla.
El estudio, realizado por investigadores de la Universidad Estatal de San Diego y la Universidad de Georgia, analizó una muestra aleatoria de más de 40 mil 300 encuestas de cuidadores de niños de entre dos a 17 años, provenientes de la Encuesta Nacional de Salud Infantil 2016.
Los participantes respondieron preguntas, por correo y en línea, sobre la atención médica existente; problemas emocionales, de desarrollo y comportamiento; y comportamientos juveniles, incluido el tiempo en pantalla diario.
Los jóvenes con afecciones como autismo, parálisis cerebral y retraso en el desarrollo fueron excluidos del estudio.
Los hallazgos, publicados en la revista Preventive Medicine Reports, revelaron que los adolescentes que pasaron más de siete horas al día frente a una pantalla por entretenimiento tenían el doble de probabilidades de recibir un diagnóstico de ansiedad o depresión.
El uso moderado de pantallas también se asoció con un menor bienestar psicológico. Mientras que los usuarios de pantallas en edad preescolar tenían el doble de probabilidades de perder la paciencia y no poder controlarse cuando estaban emocionados.
Los resultados también mostraron que los adolescentes de entre 14 a 17 años que pasaron más de siete horas al día frente a una pantalla dejaron tareas inconclusas, en comparación con aquellos que sólo estuvieron una hora al día.
Es estudio proporciona evidencia adicional de que los límites de tiempo establecidos para estar frente a la pantalla de la Academia Americana de Pediatría (una hora por día para los niños de dos a cinco años de edad, con enfoque en programas de alta calidad) son válidos.