El crecimiento y desarrollo de un niño se ve beneficiado de manera integral al establecer una relación de convivencia con un perro, pues estos animales expresan fidelidad y cariño hacia sus cuidadores. El perro es el primer animal de compañía domesticado por el ser humano y ha estado presente en la vida de muchas civilizaciones, por lo que al convivir con ellos han pasado de ser guardianes a formar parte de cada familia.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo), 80 por ciento de las familias que cuentan con un animal de compañía en casa, prefieren a los caninos debido a que son considerados excelentes compañeros, gracias a su docilidad y facilidad de relacionarse con las personas, especialmente con los niños.
Aunado a esto, la asociación Adoptare indicó que tener perros ofrece diversos beneficios ya que ayudar en los cuidados y atención de las necesidades de los animales contribuye a que los niños comiencen a desarrollar su sentido de la responsabilidad.
Asimismo, los pequeños de la casa mejoran su autoestima, pues al hacerse cargo de las necesidades de otro ser vivo, comienzan a sentirse útiles y pueden ver que sus acciones ayudan al cuidado de alguien más.
Esto les da una motivación a los pequeños para continuar con la actividad, y cuando el perro corresponde con su cariño a los cuidados que recibe, esta acción les brinda una sensación de bienestar.
En un comunicado, la organización civil destacó que convivir con estos animales impulsa a que los niños realicen actividad física, pues al sacarlos a pasear les exige un gasto importante de energía, lo que les lleva a ser más activos dando como resultado un impacto positivo en su salud.
Además la relación con los perros fortalece el desarrollo de sus defensas, prueba de ello es que la Sociedad Americana de Microbiología ha encontrado que la convivencia con animales domésticos, particularmente con perros, puede ayudar a mejorar la salud respiratoria de los niños desde temprana edad.
Otros de los beneficios es que les ayuda a mejorar sus habilidades sociales, pues desarrollan su confianza y conviven con otros niños; la compañía de un perro es ideal para evitar que se sientan solos, además de aprender a respetar la vida.