El martes de la semana pasada se prendieron las alertas de una posible salida de capitales del país. Durante una junta del Comité del Mercado Cambiario Mexicano (CMCM) en la que estuvieron presentes directivos de la banca comercial y representantes de la Secretaría de Hacienda y el Banco de México, se expuso un escenario que se anticipaba podría suceder si las señales del nuevo gobierno en materia económica no eran las esperadas: que los inversionistas comenzarían a hacer líquido parte de su dinero para sacarlo del país ante una eventualidad.
La noticia de que varias entidades financieras han registrado esta tendencia entre algunos de sus principales clientes, incluidos grandes corporativos y sociedades de inversión, cayó como balde de agua fría entre los integrantes del Comité, principalmente a los representantes del banco central y de Hacienda.
Si bien no se habló de los montos en específico que están saliendo del sistema financiero nacional, los representantes de los bancos dijeron que la tendencia podría mantenerse o agudizarse en los próximos meses, ante la previsión de que haya un crecimiento negativo para la economía mexicana en el primer trimestre de 2019 y una posible degradación de la calificación de deuda de Pemex, luego de que su plan de rescate financiero no convenciera a los inversionistas ni a los analistas de las calificadoras de valores.
La información de la junta del Comité llegó enseguida al escritorio del secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, quien ya esperaba otra mala noticia para el fin de semana: que la calificadora S&P bajaría la perspectiva de la calificación de México de estable a negativa, lo cual anunció el viernes pasado.
Si bien S&P mantuvo la calificación soberana del país la mantuvo en ‘BBB+’, indicó que hay un tercio de probabilidades de una rebaja en un plazo de hasta 18 meses, debido a menores previsiones de crecimiento económico.
El entorno macroeconómico se ha debilitado debido a las políticas del gobierno para reducir participación de la iniciativa privada en el sector energético y otros proyectos, lo cual han llevado a una caída en la inversión y la confianza, expusieron los analistas de S&P.
De acuerdo con una fuente, el anuncio de S&P pudo haber estado ligado, en parte, a lo que se expuso en la reunión de Comité Cambiario, pues junto con la calificadora Moody’s habían dado el beneficio de la duda al gobierno de Andrés Manuel López Obrador al menos para los primeros seis meses de su administración.
Un directivo de uno de los principales bancos del país comentó que todos los grandes jugadores del sector están cautelosos sobre el futuro de Pemex y la perspectiva de la deuda soberana del país. “No han habido anuncios de inversión debido a este tema”, indica. Lo mismo sucede en las principales industrias del país: los empresarios, a pesar de haber estado con el Presidente y su equipo económico recientemente, no han demostrado confianza en la nueva administración, por lo que no se han hecho anuncios de inversión.
Como lo anticipa el Banco de México, la previsible caída del PIB en el primer trimestre será el primer revés económico para el nuevo gobierno. El contraste con los datos de confianza del consumidor, que están en su máximo nivel en 12 años, hacen pensar que la realidad económica pronto se impondrá a las expectativas generadas por la llegada de un partido de izquierda al poder.
Uno de los eslabones más débiles de la cadena es la inversión privada, que combinada con una posible fuga de capitales podría generar una crisis económica como la que un poderoso senador del PRI vaticina en todas las reuniones a las que va.
Posdata. El Comité del Mercado Cambiario está integrado por Jaime Cortina Morfín, quien lo preside, Juan García Padilla y Mayte Rico Fernández, del Banco de México, así como por representantes de Hacienda y de la banca comercial. Ahí están funcionarios de CitiBanamex, Banorte, Santander, BBVA, Profuturo, Grupo Bimbo, Mexichem, Ve por Más, la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles, Banco Monex, J.P. Morgan, Vector Casa de Bolsa (de Alfonso Romo) y la Asociación de Bancos de México.
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