"Miguel es un entrenador que puede y debe estar muchos años en el América, así como se hace en muchos otros equipos. Así como Guardiola en el City o el Cholo en el Atlético. Miguel tiene el perfil y es capaz y confiamos, creemos en él y los resultados se ven ahora y antes. El grupo está entero y con ilusión. Vamos a entrar fuertes en Liguilla y pensar en estos tres puntos y así nos preparamos porque vamos a ganar”...

Estas son palabras del actual líder del América, que representan un apoyo invaluable para la inestabilidad que ha vivido Miguel Herrera en las últimas semanas al frente de este equipo. Guillermo Ochoa, en medio del caos que se dio en la presentación del reloj de Hugo Boss, por la pésima organización, logró dar este mensaje claro y contundente.
Si lo apoya Ochoa, lo deben estar apoyando todos en el plantel, aunque trasciende que algunos futbolistas no están del todo contentos con el Piojo Herrera. 

Es un mensaje preciso en el momento adecuado, con el que se muestra la decencia de Ochoa y el intentar apaciguar a una afición molesta por lo que ha sido un torneo en el que el entrenador ha sido expulsado en tres ocasiones, en el que a falta de un partido para el equipo, está en el quinto lugar general y pese a que han tenido situaciones incontrolables como la venta de jugadores, el sábado pasado cuando le ganaban a Santos, tocaron la cima de la tabla, algo que se perdió por la ineficacia mostrada en el segundo tiempo.

Pocas veces hay contacto con estelares como Ochoa, por la extensa o amplia actividad que tienen los futbolistas.

Por eso los medios deportivos acuden a llamados de relaciones públicas, como fue el caso de ayer en el Liverpool de Insurgentes, ya que siempre será atractivo tener una declaración fuera de su entorno natural, y  mostrar a la marca que patrocina es algo natural que no tiene nada de malo, pero cuando se sale de control como sucedió, resulta hasta peligroso para el personaje en cuestión.

Los medios de espectáculos, que nada tienen que ver con Guillermo Ochoa, exigieron presencia al frente, algunos con actitudes de extrema peladez como una reportera que le bajaba el brazo a un camarógrafo deportivo porque le estorbaba su visión, en lugar de moverse hizo un desplante fuera de lugar.

Y no es eso solamente, sino que se le abalanzaron los medios sociales y de espectáculos a Ochoa de una manera grotesca porque ni iban a promocionar el reloj ni saben algo de su carrera deportiva y solamente buscaban un chisme sin sentido para el momento en el que está el seleccionado mexicano.

Sabemos que las agencias de relaciones públicas buscan la mayor cantidad de medios en su evento, pero deberían ser más selectivos, ya que es como si un medio de deportes fuera a la presentación de la línea de ropa de Jennifer López.

Lo importante es que Ochoa habló y lo hizo de manera frontal, directo, honesto. Sin duda, tiene razón, Miguel Herrera es un personaje para quedarse en el América, pero debe controlarse, porque en la tribuna no sirve para maldita la cosa, lugar en el que ha estado mucho tiempo a lo largo de este torneo.

@gvlo2008

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