El Instituto Nacional Electoral (INE) eliminó anoche la candidatura de Félix Salgado Macedonio al gobierno de Guerrero. Obtuve una copia del documento de sanción. Es un reporte que indigna. Salgado Macedonio está señalado por faltas graves –que tienen que ver con el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia– y termina enfrentándose al árbitro electoral por una falla burocrática.

El caso es uno de muchos otros, principalmente del partido gobernante, Morena, discutidos ayer en sesión del INE. A diferencia de otros años, cuando el INE principalmente había multado a precandidatos por no presentar sus informes de gastos de precampaña, ahora optó por eliminarles las candidaturas.

Los defensores del Instituto consideran que la medida es legal y quienes defienden al gobierno creen que es una exageración, para beneficiar a los partidos opositores. La decisión finalmente culminará en una determinación del Tribunal Electoral federal, mas la defensa de Salgado Macedonio en ese proceso dice mucho de quién es el favorito de Morena para gobernar en Guerrero.

Entre febrero y marzo, el INE informó al partido Morena, a Salgado Macedonio y a otros cinco candidatos en Guerrero que incurrían en una falta, al no presentar sus informes de gastos de precampaña. El partido, y los candidatos, alegaron que no habían tenido actos de precampaña, y que nunca hicieron un registro formal como precandidatos, así que no tenían obligaciones de informar nada.

El hecho concreto persistía: con el nombre de aspirante, precandidato o cualquier otro, quienes quieren gobernar esa entidad hicieron eventos públicos, difundieron logos, anunciaron sus aspiraciones y no rindieron cuentas de cuánto habían gastado, ni en qué.

En el caso de Salgado Macedonio, se le llama así “precandidato” en la resolución de la Comisión de Honor y Justicia de Morena que pidió reponer la encuesta interna, ante el escándalo #UnVioladorNoSeráGobernador. A pesar de esto, y de que acudió a un acto público a registrarse como precandidato en diciembre, en su defensa por escrito insistió en que nunca tuvo esa condición en su partido.



Salgado Macedonio, en su defensa, calificó al INE de “frívolo, inocuo e infundado”. Aseguró que no tuvo una precampaña ni preferencia en cobertura periodística, pues muchas de las notas de prensa que presentó el INE como prueba eran unas en las que se “le ataca y denosta”.

El aspirante añadió un largo alegato, diciendo que dos videos en los que él aparece anunciando sus pretensiones, en Facebook y aún disponibles en línea, eran falsos (al final de esta columna están los vínculos). Vale la pena reproducir estos fragmentos: “Niego categóricamente (…) que la persona que aparece en el video sea el suscrito; segundo, que se trate de la voz del suscrito; tercero, no está demostrado ni se recabó prueba que la cuenta sea oficial y que pertenezca al suscrito, debido a la facilidad tecnológica que permite la red social Facebook cualquier persona puede hacer cuentas y videos suplantando y falsificando identidades”.

Así que Salgado Macedonio dijo en una defensa legal que dos videos en los que aparece su nombre, y en los que alguien idéntico a él mira y habla a la cámara, son de algún fantasma, que no es él. El mismo aspirante dice que no se registró como precandidato, aunque hay videos y cobertura de prensa de que lo hizo. Alega que no hubo precampaña, pero los videos en sus cuentas verificadas de redes sociales muestran los eventos, el slogan “Hay toro”, las reuniones públicas.

Si así se comporta ante hechos notorios, fácilmente verificables, ¿qué podemos pensar de señalamientos del pasado en su trato hacia las mujeres y, más preocupante, de lo que vendrá en un futuro, si resulta electo como gobernador?

Los videos donde aparece su cara, su voz, su discurso, son fantasmas, dice la defensa del hombre que quiere gobernar Guerrero. Quizá también piense que las mujeres que lo han señalado por comportamientos violentos son eso, fantasmas, que pueden dejar de existir con repetir, una y otra vez: eso nunca sucedió.