Se repite la historia de 2005, Holanda en semifinales y Brasil en la final, la gran maldita diferencia es que encontrará a un equipo sobreprotegido por el arbitraje, ante su gente y con la entera obligación de ganar por cuarta ocasión el campeonato infantil de futbol.

Momento emotivo se vivió en la conferencia de prensa previa al partido de esta noche en el estadio Rommel Fernández. Gerardo Martino llegó a tiempo a la cita con los medios, en medio de la serie de penaltis. Fue muy agradable para todos los que ahí estábamos observar el gesto de felicidad, de todos, incluido el Tata cuando la Sub-17 logró su clasificación a la final. Momento inolvidable.

Pero no sólo fue ese instante emotivo la sustancia de la reunión con los medios. Directo y claro, contundente al establecer sus prioridades futbolísticas. Tal vez siendo políticamente correcto, sin mencionar el concepto disciplina, pero se encargó de poner las cosas como son, insisto, claro y directo. El delantero centro de la selección mexicana es Raúl Jiménez, y en el caso de Miguel Layún, incluso lo ventaneó explicando que fue el jugador de los Rayados quien lo buscó insistentemente para que le explicara su NO convocatoria. Martino le dijo simplemente que hoy hay mejores laterales que él, un mensaje lapidario y directo.

Un debate que parece planificado para que Martino dijera a los cuatro vientos que efectivamente existió indisciplina en su equipo, algo que lo descontrolaría, así que inteligentemente y bajo el derecho que da ser seleccionador nacional, puede elegir a quien se le pegue la gana y no volver a convocar a Hernández, Layún y Fabián.

Lo que es terrible y lo debe saber el Tata Martino es que nadie confía en el Chicharito, porque si traicionó a su cómplice una vez, lo puede volver a hacer con quien sea, a la hora que sea.

Esta noche, México juega la tercera jornada de la Nations League de la Concacaf y sacando al menos un punto, obtendría su clasificación a la siguiente ronda de este torneo que le ha servido a Martino para confirmar su proyecto de renovar algunas posiciones en la Selección Nacional, lo cual resulta enriquecedor para el entrenador del equipo mexicano, que en verdad ha encontrado opciones para olvidarse de aquellos futbolistas que ya no están para aportar a este equipo.

La cancha del Rommel Fernández no está en buenas condiciones y es algo que preocupa a Martino, pero en esta ocasión, y a diferencia de lo que le pasó en San Antonio, para el amistoso ante Argentina, ahora no se puede quejar con nadie. Así se juega en la Concacaf, zona que poco a poco conoce mejor y en la que debe seguir mostrando superioridad con la misma congruencia que ayer dejó claro que no necesita a ciertos jugadores.

@gvlo2008

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