El gobierno de Yucatán y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presentaron hoy el proyecto para rescatar diversos espacios arqueológicos.

En Chichén Itza se invertirán 10 millones de pesos, los cuales se invertirán en la conservación del Juego de Pelota, así como la consolidación y restauración del área de Chichén viejo, que incluye mantenimiento de ornamentos y pintura mural.

Otro de los espacios que se verán beneficiados por esta colaboración es el yacimiento arqueológico de Kulubá, antigua ciudad maya que podría convertirse en un nuevo atractivo turístico y cultural de la región del Mundo Maya.

El lugar fue descubierto en diciembre de 1939 por el investigador Wyllys Andrews IV, pero fue hasta 1941 cuando fue presentado el primer reporte arqueológico del sitio, con un croquis de esta ciudad maya, que tuvo una importante relación comercial con Chichén Itzá.

Según el especialista del Centro INAH Yucatán, Alfredo Barrera Rubio, los primeros trabajos de rescate iniciaron en 1980, de la mano de varios arqueólogos y antropólogos de esa institución, y desde los primeros pasos se observó el potencial de importancia que tiene Kulubá para conocer más de los mayas precolombinos.

“La zona arqueológica que tiene una fuerte influencia maya-tolteca y presenta una arquitectura muy parecida a la de Chichén Itzá y Ek Balam, es sin duda un sitio que tiene mucho que aportar al conocimiento y nuevos hallazgos”, detalló, en entrevista.

En enero pasado se hizo oficial un plan de rescate de la mano de las autoridades yucatecas y el INAH y este día el gobernador Rolando Zapata Bello y el director de esa institución, Diego Prieto Hernández, lo presentaron oficialmente desde el sitio arqueológico.

El plan operará bajo el nombre Proyecto Arqueológico de Kulubá y fue presentado por ambas autoridades como un “hecho histórico” por su relevancia cultural y por todas las actividades que se detonarán tras el resurgimiento de la orbe precolombina.

Los trabajos incluyen un proceso de reforestación de varias hectáreas aledañas a la zona.

En total, el gobierno yucateco destinó 35 millones de pesos para labores de rescate, conservación e investigación de cinco proyectos arqueológicos en las antiguas ciudades mayas de Chichén Itzá, Izamal, Dzibilchaltún, Uxmal y Kulubá, los cuales también estarán a cargo de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Tizimín está ubicado a unos 167 kilómetros al oriente de la capital yucateca y también es posible llegar a través de otros destinos cercanos, como la antigua ciudad colonial de Valladolid o desde Cancún, Quintana Roo.

Kulubá se sumaría a la oferta de destinos culturales y arqueológicos de la entidad, junto con Chichén Itzá y Uxmal, ambas consideradas Patrimonio Cultural de la Humanidad, una vez concluidos los trabajos de rescate y oficializar su apertura al público.

vkc

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