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Dos turistas húngaros querían robar ladrillos de las ruinas de un crematorio en el campo de concentración nazi de Auschwitz, pero la policía logró detenerlos antes de que cometieran el hurto.
Los detenidos fueron un hombre y una mujer de 36 y 30 años respectivamente. La pareja ponía los ladrillos en una bolsa cuando fueron sorprendidos por otros turistas, informó ABC.
La pareja fue acusada de robar un bien cultural y aseguraron que querían tener un recuerdo, pero que no se dieron cuenta de las consecuencias de sus actos.
Fueron multados con 350 euros y sentenciados a un año de prisión, aunque la condena fue suspendida.
En Auschwitz más de un millón de judíos fueron asesinados.
