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José Mujica no entiende nada de inglés y Noam Chomsky tampoco habla español.
Aun así, el expresidente de Uruguay y el lingüista estadounidense pasaron un fin de semana juntos en 2017 en el que conversaron de todo, desde geopolítica hasta la definición del amor.
El diálogo de dos "viejos" -Mujica tiene 84 años y Chomsky supera los 90- quedó registrado en 20 horas de filmación que dirigió el mexicano Saúl Alvídrez para un documental que no ha podido ser terminado por falta de presupuesto, hasta este miércoles.
El filme está enfocado hacia la generación millennial y centennial, le dice Alvídrez a BBC Mundo, porque los que hoy son jóvenes serán los encargados de lidiar con los problemas del mundo en las próximas décadas.
"La intención fue buscar a los dos personajes más sabios que yo pudiera encontrar para que dieran una perspectiva, un mensaje a la humanidad y, sobre todo, un mensaje a los más jóvenes", explica.
José Mujica como mandatario de Uruguay (2010-2015) llamó la atención del mundo como el "presidente más pobre del mundo" por su estilo sencillo de vida, mientras que enfrente tenía a Chomsky, uno de los filósofos, lingüistas y críticos sociales más influyentes de las últimas décadas.
Ambos personajes no se conocían personalmente hasta este encuentro, aunque se tenían en buen concepto.
"Chomsky menciona a Pepe como la figura política más interesante e importante que él conoce. Pepe también hablaba cosas increíbles de Chomsky, dice que probablemente es el loco más genial que queda", explica el director.
"A pesar de que los dos están rondando los 90 años, hablamos de tecnología y muchísimas cuestiones coyunturales que una persona regular de 90 años no domina", destaca.
¿De qué hablaron?
Las vivencias que acumulan ambos se fueron mezclando desde el mismo momento en que Chomsky y su esposa entraron a la casa de Mujica y su mujer en Uruguay, relata el director.
"Cuando recién se conocen y entran a la sala, Pepe le empieza a contar a Chomsky que cuando él era joven conoció al Che, que estuvo en la URSS y en China, y a partir de eso, desde este tiempo histórico, desde esa localización, empezamos a recorrer todo el globo", recuerda.
Una traductora y Alvídrez mismo trataban de romper la barrera del idioma para las dos decenas de horas que al final del encuentro quedaron grabadas.
"Hablamos desde lo introspectivo, sobre la vida, qué es el amor, qué es la libertad, qué es el poder, qué es la vejez, qué es la muerte", explica.
"Tocamos todos esos temas y a su vez hablamos de qué es el poder, cómo se ha configurado, dónde estaba y hacia dónde va el consumismo, el individualismo, la propaganda y la manipulación mediática, la manipulación digital, la ecología, el calentamiento global, energías renovables", dice Alvídrez.
El director de la producción considera que la civilización mundial está en una encrucijada debido a que la situación medioambiental, económica, política y social actual es "insostenible".
"Los que tenemos ahora 30 años, los millennials, vamos a ser los que vamos a lidiar con esto los próximos 30 años", reflexiona Alvídrez.
"La intención entonces era que estos dos sabios hablaran, les hablaran a los jóvenes, a todos en general, pero sobre todo a los jóvenes porque somos la última esperanza para dar un giro antes de que esto se nos salga de control".
La América Latina desunida
Cuando Mujica y Chomsky dialogaban de los gobiernos latinoamericanos y aquellos que consideraban "progresistas" en la última década, se dio uno de los momentos más destacables.
"Ellos llegan a tener una discusión, una plática intensa, contraponen algunos puntos y al final los dos concuerdan, pero básicamente es una discusión sobre por qué Latinoamérica no se desarrolló", adelanta Alvídrez.
Una parte de esta reflexión derivó hacia la falta de integración de los diferentes pueblos y gobiernos latinoamericanos, y cómo ideas como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) nunca despegó.
"Pepe dice que la integración era la intención y que se hizo un esfuerzo enorme. El problema es que, desafortunadamente, los políticos latinoamericanos están más preocupados por las elecciones que vienen en su país que por algo tan trascendente como la integración latinoamericana, que al final de cuentas es indispensable", explica Alvídrez.
"Ellos manejan la idea de que ya no es un tema ni de izquierda ni de derecha, sino es una necesidad global para nuestra región, que es América Latina", añade.
¿Y a los millennials y centennials les interesa resolver esta y otras problemáticas mundiales? Alvídrez considera que sí.
"Yo creo que nosotros ya de manera inherente, simplemente por todas las críticas y circunstancias con las que nacimos, y aparte del bombardeo de información que tuvimos nosotros como primera generación de la información en la historia, creo que hay una conciencia mucho mayor en relación a las generaciones anteriores en relación en estos temas", opina.
El diálogo de Chomsky y Mujica se dio hace casi dos años y el material aún no ha podido ver la luz.
Alvídrez dice que ha puesto de su bolsillo casi la mitad de los costos de producción, además de que ha contado con un coproductor y algunos apoyos "intermitentes".
Pero explica que no ha podido pagar sueldos, el costo del equipo rentado, además de que debe pagar la edición final del documental, que está pensado en tener al menos 90 minutos de duración.
Cuestionado sobre si el filme generará ganancias que hagan redituable la producción, el director asegura que "la intención no es ganar dinero". "Necesitamos tener una recuperación de gastos".
Lo que ya tiene claro es que "Chomsky & Mujica" será lanzado en marzo de 2020.
