Eric Dier recibe la pelota del portero Jordan Pickford. Se dirige al punto de penalti, el portero inglés se descoloca, el árbitro Geiger le pide volver al sitio donde debe estar cuando se cobre el penalti.
Poco vuelo, sólo lo suficiente para que el tiempo se detenga. Disparo raso, a la derecha que pasa por debajo de David Ospina.
José Pékerman no lo ve, tenía los ojos tapados con su mano derecha, pero por el ruido silencioso de su banca sabe que Colombia ha quedado eliminada.
Este juego será recordado como la batalla del Spartak.Inglaterra y Colombia prácticamente armaron una guerra en el Spartak Stadium, una mucha sin cuartel de la cual los ingleses salen avantes en serie de penaltis 4-3, después de que en el tiempo reglamentario el juego quedara empatado a uno.
Inglaterra se enfrentará en contra de Suecia en los cuartos de final, una fase a la que no llegaba desde Alemania 2006.
Y Colombia no puede repetir la hazaña del Mundial pasado, donde James Rodríguez los metió, ahora James en la banca lesionado, en nada pudo ayudar.
Mucho esfuerzo y poco futbol. Mucha intensidad en busca del hombre uy no de la pelota, así fue el juego que ofrecieron ingleses y colombianos. Lleno de reclamaciones, lleno de tarjetas, lleno de decisiones polémicas de parte del silbanteMark Geiger de los Estados Unidos.
Duelo de pocas llegadas a gol. En la primera parte el juego aéreo británico complicó un poco a David Ospina, en tanto Radamel Falcao y compañía poco generaron en ofensiva.
Fue hasta la segunda parte que se abrió el juego, gracias ala intensidad y la violencia.
Carlos Sánchez se le colgó a Harry Kane enfrente del silbante,. Claro penalti. Después de años de reclamaciones Kane lo cobró para abrir el marcador.
Colombia dejó de reclamar y se puso a jugar, pero la gran zaga inglesa los rechazaba una y otra vez. Entró Mateus Uribe del América a tratar de controlar el medio campo que estaba abandonado por la ausencia por lesión de James Rodríguez.
Los cafeteros eran dueños del campo y del juego, no así del tiempo. El Tigre se lanza y su remate sale desviado; el Tigre tira de lejos y apenas llega a las manos del portero Pickford. La joven Inglaterra resiste con el imperio metido en su área
Yerri Mina se va de centro delantero y el milagro se produce. Remate de cabeza en tiempo de compensación, picado, el portero no llega, el defensa en la línea tampoco.
El juego se va a tiempo extra. Colombia domina. Los centros caen pero Falcao no llega; domina Inglaterra, puro juego por lo alto, pero Vardy no aparece.
Las patadas crecen de intensidad. El árbitro ya ruega porque todo termine y el juego se vaya a penaltis.
Falcao lo mete; Kane también. Cuadrado lo hace, igual que Rashford. Muriel anota y Henderson sucumbe ante el lance de Ospina. Mateus Uribe, sí, el del América, falla, y Tripper no. Viene la última tanda: Vaca el de experiencia es vencido por Peckerman y Dier resuelve la serie.
La batalla del Spartak es para Inglaterra.