Encerrada, con Gerardo Martino en la planeación de la táctica correcta y la corrección de errores para evitar caer ante el acérrimo rival, la Selección Nacional trabaja el partido ante Estados Unidos como un secreto de estado.
Y no es para menos...
El equipo tricolor ha ido de más a menos en el último mes. Tuvo grandes duelos y demostraciones en los amistosos ante Venezuela y Ecuador, pero bajó su rendimiento después de golear a Cuba en el primer partido de la Copa Oro.
México mostró distracciones puntuales en la zona defensiva ante Canadá y Martinica. Ya instalado en los cuartos de final, sufrió para eliminar a Costa Rica... Lo mismo le pasó con Haití en las semifinales.
Por eso es que Martino se ha puesto todavía más serio, de lo que de por sí es, en el trabajo.
Se espera que el único cambio que muestre ante Estados Unidos sea el regreso de Uriel Antuna como titular por derecha, para dejar a Roberto Alvarado en la banca, aunque lo que más necesita es recuperar a algunos lesionados.