Aunque la molestia sigue presente entre la afición del Cruz Azul, el sentimiento de decepción es el que abunda. Antes, cuando la polémica se hacía presente en las entrañas del club, las afueras de La Noria se abarrotaban de seguidores que manifestaban su malestar.
Hoy, la directiva tocó fondo. Poco más de 20 aficionados se asomaron, con carteles que, en poco tiempo, han pasado de exigencias a lamentos, resultado de la actualidad del equipo.
"Nos chingaste, Garcés", se leía en un cartel. "Ya nos la Peláez", en otro con obvia referencia. Pero las palabras de los presentes definieron el ambiente.
"Es increíble como pasan por alto la historia de un club y lo pisotean como si fuera cualquier cosa. Lo tratan como un negocio y hasta para eso son idiotas", dijo Álvaro, de 18 años.
"Si te das cuenta, ya hasta somos menos los que venimos, aunque sea a mentársela, porque ya se nos ve como el hazme reír y créeme que da pena; pero claro, Garcés y el otro no son para salir y dar la cara", acusó Diego, que dice ser hincha de La Máquina desde que tiene memoria.
Algunos otros presentaron algunos desplegados en mantas. El más grande decía "Orgullo Obrero", irónico si se toma en cuenta que, durante la conferencia de su presentación, Robert Dante Siboldi consideró que la afición de Cruz Azul carece de orgullo.
Por ahora, el nuevo técnico de La Máquina está exento de la crítica, al menos del reproche. Pero la afición ha demostrado que estaba con Peláez y éste abiertamente expresó que no contaba con el uruguayo, así que la paciencia con él será reducida.