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El América derrotó 2-0 al Morelia y disputará la final del Apertura 2019.
Una vez más, las Águilas llegaron en desventaja al partido definitorio de una llave de eliminación directa. Y una vez más, avanzaron en la serie.
Aunque los primeros minutos del encuentro transcurrieron sin la intensidad que se entendería implícita en un duelo de semifinal, Miguel Herrera y los miles de aficionados que se dieron cita en el Estadio Azteca no dieron seña de desesperación.
Nadie se inmutaba con la poca generación de llegadas al marco michoacano, como si se tratase del script de una obra, una que ya habían visto antes.
El tono subió, y también los decibeles, cuando al 37', Andrés Ibargüen encabezó una descolgada por la banda izquierda, que derivó en un pase raso hacia el centro, donde Renato Ibarra controló el balón y disparó con la pierna izquierda, para batir a Sebastián Sosa, que no pudo reaccionar ante un desvío de Efraín Velarde.
Los locales comenzaron a atacar con mayor enjundia y, al 44', el clímax de la función llegó, cuando Federico Viñas remató con la cabeza un centro de Roger Martínez —quien había ingresado por Ibarra (lesión)—, e hizo el segundo tanto.
Sólo un gol necesitaban los dirigidos por Pablo Guede para acceder a la final, pero los casi 64 mil presentes compusieron un escenario poco familiar para la visita, que pronto sucumbió ante la presión.
Al 70', por fin los michoacanos reaccionaron y un gol de Fernando Aristeguieta silenció al Coloso, que pronto volvió a estallar en júbilo, cuando el VAR determinó que había fuera de lugar y la anotación quedó invalidada.
Siete minutos después, los constantes embates americanistas culminaron en un gol de Roger, que también fue revisado en el VAR e invalidado por una mano.
Monarcas se volcó al frente, con deseo pero escasa claridad y, al final, el América, cómodo con la situación y tranquilo con el 2-2 global, celebró el pase a la final, que se redondeó con una atajada de Guillermo Ochoa en los últimos minutos.
