Las innumerables lagunas que suele tener el reglamento del futbol mexicano podrían jugarles una mala pasada a sus directivos en la final del Clausura 2018.
El duelo por el título del balompié mexicano está programado para el domingo 20 de mayo, día en el que también se llevará a cabo el segundo debate de los candidatos a la Presidencia de la República. Las pláticas han iniciado para que no se empalmen y la solución es que la final comience a las 6 de la tarde, ya que el evento político arrancará a las 8 de la noche. El problema radica en que se vayan a tiempos extra en el futbol, y no cómo adelantar el juego aún más, porque el reglamento estipula que lo más temprano deben ser las 6 de la tarde.
Venta de Castillo, lema de campaña de presidente de Pumas
Nicolás Castillo tiene el tiempo contado en Pumas. Su salida se justificaría, como en su momento sucedió con Ismael Sosa y Matías Britos, por el bien de las arcas del club. Las finanzas no son del todo estables y, para evitar números rojos, la venta del chileno será fundamental. Y no es que a él le incomode la idea, ya que su salida sólo podría ser a Europa.
La estrategia, de la mano del presidente Rodrigo Ares de Parga, marcha de cara a la Asamblea General Ordinaria con el Patronato (19 de abril), donde rendirá cuentas y dejará ver sus intenciones para reelegirse, a dos años de terminar formalmente su gestión; sin embargo, los estatutos del club aún están pendientes para permitir la extensión del mandato.