El fuego Olímpico conmemorativo de los Juegos Olímpicos de México 1968 salió del Comité Olímpico Mexicano hacia el estadio Olímpico Universitario, a cargo de Rebeca Vaca, para que en cuestión de horas, Enriqueta Basilio encienda el pebetero igual que hace 50 años.
La flama será transportada por 104 relevista por un tramo de 20 kilómetros hasta llegar a CU, en donde los ex atletas de los Juegos formarán los Aros Olímpicos.
En su regreso a México, el campeón Olímpico y récord mundial con su salto de longitud de 8,90 metros, Bob Beamon, con un emotivo discurso, señaló que estar de vuelta en esta maravillosa ciudad donde "todo empezó y donde se marcó la pauta de como sería el deporte para las siguientes generaciones".
El estadounidense recordó el día que logró lo que para muchos fue el salto del siglo, cuyo récord perduró por 22 años.
"Muchas cosas hermosas pasaron en la Ciudad de México, por eso me siento orgulloso de formar parte de las celebraciones por los 50 años, ¡han pasado 50 años y seguimos aquí! ".
En la ceremonia del encendido estuvieron presentes Felipe Tibio Muñoz, Dick Fosbury, Debbie Meyer, Ricardo Delgado, Michael Burton, entre otras leyendas del olimpismo.