Liderado en la primera mitad por un inspirado Lionel Messi, el Barcelona firmó hoy una puesta de largo redonda ante su hinchada al imponerse por un rotundo 3-0 a Boca Juniors en el Trofeo Joan Gamper.
Un gol del astro argentino (39'), otro del brasileño Malcom(17') y uno más de Rafinha (67') bastaron para que el campeón español superara al bicampeón de la Superliga argentina en un choque sin la tensión competitiva de los duelos con algo en juego.
En un Camp Nou soleado y con miles seguidores "xeneizes" en la grada, los catalanes sumaron así su segundo trofeo de la recién iniciada temporada y contentaron a su afición, que tuvo detalles para el optimismo.
La de Boca, llegada por miles desde todo el mundo y menos cantarina que de costumbre, tuvo conformarse con ver, por fin, a los suyos enfrentándose a su compatriota Messi en el impresionante coliseo azulgrana.
Lejos de arrancar con todo para medirse al todopoderoso equipo español, Guillermo Barros Schelotto reservó a buena parte de sus titulares durante los primeros 45 minutos y Boca lo pagó sumando su sexta derrota, en otras tantas participaciones, en el torneo que el Barcelona aprovecha para presentarse ante sus fans.
Cierto es que el campeón argentino ya se estrenó en el campeonato doméstico y que, con Libertad de Paraguay esperándolo en la vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores, el entrenador argentino priorizó el descanso de sus imprescindibles.
No es menos cierto que, a tres días para que arranque una nueva Liga española, Ernesto Valverde buscaba un triunfo que generase optimismo, al tiempo que rodaba al equipo y probaba la adaptación de los nuevos.
De entre ellos, sólo Malcom y el chileno Arturo Vidal tuvieron un hueco en el once de partida, el más cercano al que el sábado se medirá al Alavés en la primera fecha del campeonato doméstico.
Con un gol que mostró su buen disparo desde media distancia, el extremo brasileño no podía haber tenido mejor debut ante su nueva hinchada. Su festejo, encendido, también tuvo un tono de reivindicación, después de que Valverde dejara entrever que no fue fichaje solicitado por él.
El entrenador azulgrana optó por un 4-3-3 ante un Boca que salió sin Carlos Tévez, Mauro Zárate ni Pavón. Ante la ausencia de Sergio Busquets y pese a la presencia de Ivan Rakitic y Coutinho, Messi dirigió las operaciones siempre que le vino en gana, burló a la defensa "xeneize" cuando quiso y, finalmente, acudió a su ineludible cita con el gol en el Gamper picando el balón, de manera sutil, por encima de Andrada. Fue su sexto gol consecutivo en el torneo.
Boca pudo recortar distancias justo antes de la pausa en una doble ocasión de Villa y Nández que se estrelló contra el palo.
En la reanudación, Valverde cambió prácticamente todo su once, Messi incluido, para seguir haciendo pruebas. Rafinha no desperdició la ocasión para reivindicarse con un gran tanto, el tercero del Barcelona, muy similar al anotado por Messi.
Schelotto, mientras, dio entrada a algunos de sus titulares, Pavón y Zárate primero, Tévez más tarde. Nada cambió para el equipo más laureado de la Argentina, incapaz como fue de generar acciones de verdadero peligro para el arco defendido por Jasper Cillessen.
El Xeneize abandonó el Camp Nou sin la victoria de prestigio que buscaba, mientras que el Barcelona encaró con optimismo su próximo estreno en la verdadera competición.