Al menos tres personas perdieron la vida y otras 12 resultaron heridas, entre ellas tres jugadores, en los graves disturbios registrados en la ciudad de Tegucigalpa, Honduras, tras el ataque al autobús del equipo Motagua.
El suceso se produjo antes del encuentro previsto entre el Motagua y el Olimpia, correspondiente a la quinta jornada del torneo Apertura y que fue suspendido por las autoridades por falta de garantías.
Las tres víctimas mortales se registraron cuando eran trasladadas al Hospital Escuela, adonde han ingresado al menos una docena de lesionados. El incidente se registró una media hora antes del clásico capitalino entre ambos equipos, cuando el autobús del Motagua fue atacado por hinchas contrarios con piedras y botellas de vidrio, lo que causó una batalla campal tanto afuera como adentro del Estadio Nacional de Tegucigalpa, además provocó que los futbolistas Emilio Izaguirre, Roberto Moreira y Jonathan Rougier resultarán heridos por cortaduras.
El enfrentamiento entre “barras” dejó otros heridos de gravedad y al menos otros siete se encuentran en cuidados médicos. La revuelta provocó que los agentes de seguridad lanzaran gas lacrimógeno cerca del inmueble deportivo, afectando también a los aficionados que ya se encontraban dentro del estadio.
Nuestros jugadores, Emilio Izaguirre, Roberto Moreira y Jonathan Rougier, están siendo atendidos en un centro hospitalario después del ataque vandálico a nuestro bus pic.twitter.com/8rptzSYmZk
— Fútbol Club Motagua (@MOTAGUAcom) August 18, 2019
Las autoridades del balompié hondureño oficializaron la suspensión del encuentro, que en la previa se espera un espectáculo deportivo pero lo que debió ser un simple partido de futbol terminó en tragedia.