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Torreón.— La pantera despertó. De andar lento. De mirada cansada. Como desinteresado de lo que ocurre alrededor.
Así es como transita en la cancha Jorge Djaniny Tavares. Sin tomarle mucha importancia al juego hasta que llega la pelota a sus pies... Así sucedió al minuto 70, cuando vio al esférico en el aire y comprendiendo que era su hora de actuar, arrancó como gacela, peleó el balón como león, danzó sobre defensa y portero como garza y definió con la calma de un elefante.
Así, el de Cabo Verde despertó de su letargo y enfiló a Santos rumbo al triunfo en el juego de ida de la gran final contra Toluca.
“Claro que estoy contento, estoy feliz, no sólo por el Santos sino por todo lo que está pasando alrededor”, dice el que también tiene nacionalidad portuguesa.
Campeón de goleo con los Guerreros, es el quinto con la camiseta del club de La Laguna y quiere redondearlo con el título del futbol mexicano, como lo hizo Jared Borgetti en el Verano de 2001, cuando fue el rey del gol y su equipo el rey del futbol nacional.
“Vamos paso a paso, lo que sucedió en el torneo regular fue muy bonito, pero ya pasó, ahora hay que pensar en el club y que tenemos posibilidades de ser campeón.”
Están a 90 minutos de lograr la hazaña. Los Guerreros viajan a Toluca, casa del Diablo, con la ventaja en el marcador y en la mente, el golpe sicológico que se le dio a los choriceros fue tremendo.
Hay que acabar con la obra... “No va a ser nada sencillo. Toluca fue de los mejores equipos en su casa, se mantuvo durante muchos juegos invicto, ganó muchos partidos de forma consecutiva, debemos de planear muy bien el juego”.
La ventaja es algo con lo que se puede jugar, “seguramente ellos saldrán a atacar desde temprano, con muchos hombres, y eso provoca huecos... Hay que esperar, hay que aguardar el momento preciso y no ser imprudentes. Vamos con el partido ganado pero no somos campeones. No hay que sentirnos nada de lo que no somos aún”.
Jorge Djaniny Tavares, nació hace 27 años en Santa Cruz, Santiago, Cabo Verde, país africano que durante mucho tiempo fue colonia de Portugal, en 1975 lograron su independencia del país europeo.
Tavares, a los 18 años de edad salió de su país rumbo a tierras portuguesas, el futbol lo subió a un barco. Jugó en equipos de media tabla en la liga lusitana hasta que en 2011, en el Pacos de Ferreira se encontró con Pedro Caixinha quién desplegó sus actitudes lo que lo hicieron ser contratado por el Benfica. En las Águilas nunca despegó, se inconformó con el trato hasta que salió del club en el 2014 para llegar, de la mano de Caixinha al Santos.
Ya ganó un título con los Guerreros, Clausura 2015, y va por el segundo.
El resto es historia.
