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Tras las victorias que lograron hoy España y Portugal, el primer puesto del Grupo B del Mundial de Rusia 2018 podría acabar decidiéndose por número de tarjetas amarillas o incluso mediante un sorteo.
España derrotó hoy 1-0 a Irán en Kazán con un gol de Diego Costa, horas después de que Portugal venciera por idéntico resultado a Marruecos en Moscú con un tanto de Cristiano Ronaldo.
Como España y Portugal empataron 3-3 en la primera jornada, están ahora cada una con cuatro puntos. Irán es tercera con tres, mientras que Marruecos, ya eliminado, cierra la zona sin puntos.
España y Portugal están empatadas a puntos, diferencia total de goles y número de tantos a favor, por lo que si ganan la última jornada por idéntico resultado habrá un empate total.
España se enfrenta el lunes a Marruecos y en simultáneo jugarán Portugal e Irán.
Si, por ejemplo, tanto España como Portugal vencen 1-0, estarán empatados en todas las categorías principales que utiliza la FIFA para decidir las posiciones de los grupos.
El primer criterio de desempate, obviamente, es el número de puntos. España y Portugal, ganando, estarían con siete cada una.
Después decidiría la diferencia de goles totales. Ahora mismo llevan +1 cada equipo, por lo que el mismo resultado el lunes dejaría todo igual. Y la tercera categoría de desempate sería el número de tantos anotados, que tampoco sufriría ningún cambio debido a que cada uno tiene cuatro.
Así, se pasaría al segundo grupo de criterios que establece la normativa FIFA: a) mayor número de puntos obtenidos en los partidos de grupo entre las selecciones en cuestión; b) diferencia de goles en los partidos de grupo entre las selecciones en cuestión; y c) mayor número de goles marcados en los partidos de grupo entre las selecciones en cuestión.
Pero si ganan por el mismo resultado el lunes, todo seguiría igual. ¿Entonces? Pues se aplicaría la penúltima regla del desempate.
"Mayor número de puntos obtenidos en el sistema de puntos por deportividad, con el cual se deducen puntos por las tarjetas recibidas", dice la FIFA. Cada tarjeta amarilla restará un punto, cada roja por doble amarilla quitará tres, mientras que la expulsión directa penalizará con cuatro y la roja directa tras una amarilla con cinco.
España solo ha recibido una amarilla en los dos primeros partidos, mientras que Portugal fue castigada con dos. Ningún equipo vio una roja.
Si también empataran en amarillas, el ganador de la zona se decidiría por un sorteo que realizaría la FIFA.
