Tras la riña que se suscitó este domingo durante el encuentro entre el Atlético de San Luis y Querétaro, Jaime Pineda Arteaga, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), reconoció que los hechos de violencia en el estadio Alfonso Lastras eran previsibles y aunque aseguró que se cumplió con los protocolos de seguridad que establece la Federación Mexicana de Fútbol, se tendrán que modificar y tomar nuevas medidas para que situaciones de esta naturaleza no vuelvan a suceder.

Detalló "hay protocolos establecidos por parte de la Federación y nosotros solo vamos en apoyo, pero es difícil contener a dos mil o tres mil personas de ambas porras que son las que pusieron en peligro a los otros 20 mil aficionados y son los que resultan mayormente perjudicados".

Pineda Arteaga recordó que es un partido de alto riesgo y por eso se tomaron las medidas necesarias, no obstante, no fue suficiente y en conjunto con las autoridades del estadio, la directiva del club Atlético de San Luis y la Federación Mexicana de Fútbol, se tendrán que reforzar las estrategias para que no se vuelva a presentar una situación similar.

Durante su comparecencia, señaló que la corporación estatal solo coordinó la seguridad “porque hay un jefe de seguridad al interior del estadio”.

El comisario apuntó que el conflicto inició porque la porra del equipo visitante “arrojó una butaca y eso enfureció a la gente y empezó el problema”.

Reconoció que la seguridad del estadio se sintió rebasada y “abre una puerta”, sin embargo, la porra del equipo local se va contra el visitante y se armó un verdadero descontrol; nosotros nos preocupamos por la seguridad de las familias y si se dan cuenta protegimos, nos dedicamos a proteger a la familia, lo que nos interesaba era sacar también a la porra visitante y nos dimos a la tarea de eso”.

Pineda Arteaga apuntó que solo fueron daños y afortunadamente no hubo decesos. Además, sugirió que no se deje viajar a las porras de los equipos visitantes.

Asimismo, el titular de la SSPE señaló que participaron 200 elementos de la dependencia y como saldo se reportaron diez patrullas dañadas, 30 vehículos dañados y cuatro personas que requirieron atención médica.

Al ser cuestionado sobre si el consumo de alcohol podría haber detonado los hechos violentos por parte de quienes intervinieron, el comisario respondió que es un tema que no le toca a su institución y ya sabrán los encargados del tema si hay que tomar medidas en este sentido.

Finalmente, puntualizó que a la dependencia le corresponde seguir apoyando y colaborando para brindar seguridad a los asistentes a cualquier evento deportivo.

vkc

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