Paola Espinosa tiene un dicurso bien dominado ante los medios de comunicación.
Cada vez que puede resalta su regreso al alto rendimiento, luego de que se recuperara de su embarazo, respalda las decisiones de la Federación Mexicana de Natación y, ahora, ha agregado un nuevo argumento: alabar los premios que dio el presidente Andrés Manuel López Obrador a la delegación mexicana que participó en los Juegos Panamericanos de Lima.
A la clavadista se le preguntó si llamaba la atención que la misma administración que había recortado becas a algunos atletas en la víspera de los Juegos de Lima, ahora, apenas unos meses después de ese ajuste, los premie.
“Sabíamos que [el Presidente] nos iba a cumplir con los premios. En la reunión que tuvimos todos [los asistentes de la delegación] estábamos contentos y tranquilos”, sostuvo.
Espinosa mantiene un discurso esquivo cuando se le realizan preguntas puntuales. Por ejemplo, el hecho de que Canadá recortó la diferencia con México en el medallero de clavados en Lima 2019 y que estuvo cerca de arrebatarle el título, lo desestimó.
“Para mí, ganar es ganar”, mencionó.
También se le cuestionó sobre su actuación en Panamericanos, en los que ganó dos bronces, que le permitieron llegar a 15 preseas en este tipo de justas, que la confirmaron como la máxima ganadora de metales en el certamen del país, pero que también significaron su actuación más floja desde que hizo su debut, en los ya lejanos Juegos de Santo Domingo 2003.
“Es una buena actuación, estoy muy satisfecha”, dijo.