El pasado 31 de enero el pleno de la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) analizó una de las adquisiciones de medios más relevantes en los últimos años en México que tendrá importantes implicaciones para negocios que van de la transmisión de deportes a la exhibición cinematográfica, pues afecta uno de los procesos clave para la industria del entretenimiento moderno: la distribución de contenidos audiovisuales.
The Walt Disney Company, una de las empresas de medios más grandes del mundo, propietaria de un vasto portafolio mundial de contenidos que van del universo Star Wars hasta la familia de canales deportivos ESPN, anunció en diciembre de 2017 su intención de adquirir a 21st Century Fox, empresa propietaria de estudios de cine y docenas de canales de televisión como Fox Sports y National Geographic. Esta transacción, valuada en 71 mil 300 millones de dólares fue aprobada por los accionistas de ambas empresas en julio del año pasado.
La Unión Europea, Brasil y Estados Unidos, entre otras jurisdicciones, han revisado esta operación pues podría crear efectos nocivos a la competencia al unir dos grandes compañías de contenidos audiovisuales que frecuentemente compiten entre sí.
En Estados Unidos el Departamento de Justicia impuso en junio del año pasado una serie de condiciones para la aprobación de esta adquisición mientras que la Unión Europea dio luz verde a la transacción en noviembre también bajo el cumplimiento de algunas condiciones.
En Brasil el Conselho Administrativo de Defesa Econômica (CADE) comenzó en julio del año pasado la revisión de la compra y se estima que hacia marzo podría emitir una decisión al respecto.
Ha trascendido que los comisionados de COFECE determinaron que por lo que hace a los mercados que les correspondía analizar (películas, DVDs y mercadeo), no encontraron motivos de preocupación sobre posibles daños a la competencia derivados de esta fusión, por lo que habrían dado ya su visto bueno.
Habrá que ver ahora qué hará el pleno del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), autoridad a la que le corresponde estudiar los temas más importantes o clave para el sector telecomunicaciones. En este caso, nos referimos a los efectos sobre la competencia en los mercados de distribución de contenidos audiovisuales a través de distintas plataformas, como la televisión abierta, la televisión restringida o la televisión por Internet.
En ese análisis, tal como lo hicieron las autoridades de otros países, se espera que el IFT estudie con detenimiento los efectos sobre los distintos segmentos de esos mercados, pues se sabe que de manera particular, existen preocupaciones fundadas sobre el posible daño o riesgo para la competencia en lo que corresponde a canales deportivos, donde la empresa resultante representaría una concentración elevada.
Dicha empresa tendría el poder para imponer condiciones a los sistemas de televisión de paga, en detrimento de los usuarios –señaladamente aquellos de los paquetes económicos más bajos- que en la actualidad tienen acceso al contenido de los canales deportivos con eventos de gran interés, como lo son partidos de futbol de la liga local y de otros torneos internacionales.