La actividad escolar es el principal motor para activar las ventas de carne, frutas, verduras y abarrotes en general, por lo que desde que iniciaron las vacaciones a la fecha, los comerciantes de estos sectores registran una baja de hasta 30 por ciento en sus negocios.
El presidente de la Central de Abastos, José Luis Olivares Robles, explicó que durante el período escolar la venta de frutas y verduras se mantienen, ya que los padres de familia compran lo suficiente para desayuno, lonches escolares y comida, sin embargo, durante las vacaciones existe mayor "relajamiento" y las familias comen en la calle aprovechando los días de descanso.
“Aquí lo que afecta las ventas en el centro de abastos son las vacaciones, el motor de la economía son los niños, si no hay clases no hay gran consumo, no es lo mismo que los niños estén en su casa a que vayan a la escuela".
No obstante, reconoció que de forma general la actividad comercial en la Central de Abastos no se ha visto afectada como otros sectores que reportan cierres y significativas caídas, “de momento no se ha registrado ningún cierre de bodegas”.
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dllo