A nivel nacional, la tasa de desocupación, la cual considera a la población que se encuentra sin trabajar, pero que está buscando trabajo, se ubicó en 3.3% de la población económicamente activa en noviembre pasado, tasa mayor que la de 3.2% registrada un mes antes, con series ajustadas por estacionalidad, informó el Inegi.
La tasa de subocupación, referida al porcentaje de la población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual le demanda, representó el 7.1%. En su comparación anual, esta tasa fue mayor a la del mismo mes de 2017 que cerró en 6.9%.
La tasa de informalidad laboral fue de 57.1% en el penúltimo mes de 2018, cifra por arriba de la reportada en octubre pasado, y mayor en 0.3 puntos respecto a la de igual mes de 2017.
Dicha tasa se refiere a la proporción de la población ocupada que es laboralmente vulnerable por la naturaleza de la unidad económica para la que trabaja, con aquellos cuyo vínculo o dependencia laboral no es reconocido por su fuente de trabajo.
Asimismo, la tasa de ocupación en el sector Informal, que se refiere a la proporción de la población ocupada en unidades económicas no agropecuarias operadas sin registros contables y que funcionan a partir de los recursos del hogar o de la persona que encabeza la actividad sin que se constituya como empresa, representó el 27.4% en noviembre del año en curso, proporción mayor a la observada en el mes previo que fue de 27.1%, y un aumento de 0.6 puntos frente a la del mismo mes del año pasado.
En noviembre de 2018, el 59.6% de la población de 15 años y más en el país se ubicó como económicamente activa (tasa de participación). Esta tasa es superior a la del mes previo, también con cifras ajustadas por estacionalidad.