Tras el anunció de Grupo Aeroméxico de su plan de reestructura así como el despido de por lo menos 200 empleados administrativos y operativos, anoche informó la ASSA que entre ellos 60 son sobrecargos.
Estos ajustes son consecuencia de la decisión de la aerolínea de bajar a tierra cinco aviones y suspender nueve rutas en 2019, ante la previsión de que no habrá una ampliación de la capacidad del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en el corto plazo, a pesar de que la demanda de transporte aéreo sigue creciendo.
Por su parte la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA) emitió un comunicado en el cual lamentan la separación de las fuentes de trabajo de los empleados que obedecen exclusivamente a “ajustes operativos, financieros” y “escasos márgenes operativos que deriva en una pérdida de mil doscientos millones de pesos, así como al alza en el precio del combustible, a la volatilidad del tipo de cambio peso-dólar americano y a un exceso de oferta de asientos en el mercado doméstico” señalan.
Convocan también la próxima semana a una Asamblea general extraordinaria para exponer esta solicitud a sus compañeros y que de esta surjan propuestas de solución. En los próximos días se reunirán con la administración de la empresa a efecto de proponer alternativas de salida en donde lo principal será la preservación del empleo.
Finalmente admiten “que esos tiempos son complicados para todos los que trabajamos y colaboramos en grupo Aeroméxico sin embargo saldremos adelante en un ganar -ganar como ha sido característica por parte de empresa y de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México” concLuye el documento firmado por Ricardo del Valle Solares, Secretario General ASSA de México.
