La falta de agua limpia limita el crecimiento económico en un tercio y agrava el problema de la pobreza, advirtió el Banco Mundial (BM).
En el reporte Calidad desconocida: La crisis invisible del agua, urgió a los países a atender el problema porque está transformando al elemento en veneno.
En México esta situación aumenta las enfermedades diarreicas con impactos en mayores gastos en salud, señaló.
Hizo ver que la combinación de bacterias, aguas residuales, productos químicos y plásticos, puede absorber el oxígeno de los suministros de agua, dañando a las personas y los ecosistemas.
El presidente del Banco Mundial, David Malpass, dijo que “el agua limpia es un factor clave para el crecimiento económico”.
Su deterioro frena el desarrollo, empeora las condiciones de salud, reduce la producción de alimentos y exacerba la pobreza.
El BM alertó que debe haber una atención inmediata por ser un peligro para todo el mundo.
Recomendó a los países aplicar políticas y normas ambientales, y hacer un seguimiento minucioso de las cargas de contaminación.
También urgió a tener infraestructura de tratamiento del agua respaldada con incentivos para la inversión privada e inspirar la participación ciudadana.
México, enfermo. Los análisis realizados en Brasil y México indican algunos impactos de segundo orden. Esto sugiere que los patógenos asociados con el aumento de la demanda biológica de oxígeno (DBO) en la calidad del agua pueden incrementar las enfermedades, ponderó.
La demanda biológica de oxígeno es una medida indirecta que captura el resultado de una gran cantidad de contaminantes que afectan el oxígeno disuelto.
El BM advirtió que en México, la DBO está por encima del umbral recomendado de seis miligramos por litro prescritos por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), lo que provoca que crezca la incidencia de las tasas de hospitalización relacionadas con la diarrea entre 7% y 12%.
Otro contaminante geogénico común del agua es el fluoruro, porque a menudo se produce con arsénico, destacó el reporte.
El Banco Mundial también reconoció la reforma que emprendió México con el Programa de Agua Limpia, que condujo a una mejora significativa.