El Serie 3 "mexicano" es igual de bueno que un alemán
Manejamos el primer vehículo de BMW 100% hecho en México.
Hace cinco años se puso en la mira a la mitad de 2019 como una de las fechas más trascendentes para el futuro de la manufactura automotriz de nuestro país.
Y es que en 2014, BMW anunció que construiría su planta de producción más moderna a nivel global en el estado de San Luis Potosí y que ésta produciría el auto más importante en el portafolios de la marca alemana: el Serie 3.
La fecha llegó y las primeras unidades de este icónico sedán han salido de la línea de producción potosina para ser ofrecidas en el mercado nacional y también ser exportadas al mercado de Estados Unidos, Canadá, Latinoamérica y algunas regiones de Asia.
Esta semana hemos manejado el nuevo Serie 3 para evaluar qué tan bien cumple con las expectativas de manejo que se le exigen y, al mismo tiempo, evaluamos si la manufactura mexicana está a la altura de uno de los productos que históricamente se relacionan al lujo y al refinamiento automotriz.
El nuevo Serie 3 sigue la tendencia de casi todos los autos nuevos en el mercado global y en términos generales se puede reducir a que es mucho más grande.
La distancia entre sus ejes ha crecido 41 milímetros contra la versión que reemplaza y en ese mismo tenor, el largo del eje trasero y delantero han aumentado 21 milímetros y 43 milímetros, respectivamente.
Sin embargo, el empleo de una nueva plataforma de este modelo le ha permitido a los ingenieros de BMW reducir 55 kilogramos del peso total del Serie 3 y, a la par de la disminución en su centro de gravedad, la nueva generación es ahora más aerodinámica.
La reconfiguración en el BMW Serie 3 ha servido para que la nueva estructura que lo compone sea 55% más rígida que la presente en la generación anterior, beneficiando a la seguridad y a las sensaciones de manejo en condiciones de pista.
A la par de las reinvenciones en el “hardware” del Serie 3, los alemanes han puesto particular atención al “software” en aras de volver al G20 en el referente de tecnología y conectividad en el mundo premium.
Como novedades en materia tecnológica, el nuevo Serie 3 destaca por ser el primer ejemplar en la historia de la marca en contar con un nivel de manejo autónomo de grado 2.
Esto significa que el conductor puede prescindir del uso de sus manos para controlar diversas operaciones en el auto como un manejo a velocidad constante u maniobras que complican el manejo diario.
Inicialmente, se comercializará la versión 330i, la cual equipa un motor de cuatro cilindros en línea y 2.0 litros de desplazamiento que genera 285 caballos de fuerza. Este modelo está equipado con tecnología TwinPower Turbo y un acoplamiento de transmisión automática de ocho velocidades.
Sorprende que, a pesar de tratarse de la versión “media” del coche, éste tiene un manejo envidiable en términos de curveo, respuesta de transmisión y precisión en la dirección.
La capacidad del auto para adaptarse a cada clase de manejo es simplemente sublime si consideramos que gran parte del público que se haga de uno de éstos, lo empleará como vehículo del diario. Así, pues, el nuevo Serie 3 puede devorar de manera agresiva todas las curvas de la pista de la Magdalena Mixhuca y en cuestión de segundos, volverse una cápsula de navegación que absorbe irregularidades del camino sin perturbar a sus pasajeros.
A pesar de que el nuevo Serie 3 fue presentado de manera oficial esta semana, su comercialización en México inició desde abril del año en curso.
No obstante, estas unidades aún provenían de la planta de manufactura de Alemania y no de la instalada en San Luis Potosí.
A propósito de la disponibilidad de ambas versiones, pusimos frente a frente a un Serie 3 de origen alemán y a otro egresado del complejo mexicano.
Por más exigentes y minuciosos que quisimos ser, la diferencia en la calidad de ensamble y armado de ambos es verdaderamente imperceptible.
Sin tener ganancia en las actividades de BMW o ser dueño de un nuevo Serie 3, es motivo de orgullo darse cuenta que en nuestro país se puede ensamblar uno de los mejores autos del mundo en la actualidad.
El G20 es no solo el regreso de BMW a la contienda por el mejor sedán del mundo, sino la creación de uno de sus mejores autos.