El debate en torno a la reducción de la jornada laboral y la eventual creación de una prima sabatina ha generado inquietud en el sector empresarial.
El presidente de la Asociación de Ejecutivos de la Gestión del Talento Humano (Aderiac), Daniel Escobedo, señaló que aunque se trata de iniciativas interesantes, todavía no existe un consenso definitivo, pues actualmente en la Cámara de Diputados se analizan al menos 13 propuestas distintas.
De acuerdo con el líder empresarial, cualquier modificación de este tipo requiere no solo ajustes a la Constitución, sino también a la Ley Federal del Trabajo, lo que implica un proceso más complejo y de largo plazo.
Lee también: San Luis Potosí tendrá nueva planta japonesa; Gallardo confirma inversión por 7 mmdp
“Es fundamental que los cambios estén bien estructurados y que se implementen con gradualidad, especialmente para apoyar a las pequeñas y medianas empresas, que no tienen la misma capacidad que una gran industria”, expresó.
El dirigente advirtió que la reducción de la jornada laboral tendría un impacto directo en los costos de operación, estimado en alrededor de 20 por ciento en el gasto de mano de obra.
En ese sentido, planteó la necesidad de que los legisladores consideren esquemas diferenciados según el tamaño y el tipo de negocio, ya que no es lo mismo una empresa de manufactura que una de servicios.
Respecto a la posible prima sabatina, el presidente de Aderiac explicó que la situación debe analizarse con mayor claridad, ya que la legislación actual solo reconoce el domingo como día de descanso obligatorio.
“Si el sábado llegara a contemplarse también como día de descanso, automáticamente se debería aplicar una prima, lo que significaría un doble impacto económico para las empresas”, comentó.
El empresario recordó que hay sectores que no pueden detener operaciones bajo ninguna circunstancia, como hospitales, servicios de emergencia y diversas industrias que trabajan los siete días de la semana. “No se le puede decir a un paciente que regrese el lunes porque ya es día de descanso. Hay actividades que simplemente no pueden parar”, enfatizó.
Por ello, aseguró que la Alianza Empresarial ya ha solicitado reuniones con legisladores para analizar a fondo el modelo que podría adaptarse a la realidad mexicana sin afectar ni a los trabajadores ni a la planta productiva.
Finalmente, destacó que la ley laboral establece que el día de descanso debe ser preferentemente en domingo, por lo que, de aprobarse los cambios, se modificarían de manera sustancial los esquemas de trabajo actuales, ya que los descansos podrían trasladarse a otros días de la semana.