La industria de la construcción atraviesa uno de sus momentos más difíciles de la última década.
El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en San Luis Potosí, Leopoldo Stevens Pérez, señaló que el sector registra una contracción del 32 por ciento en comparación con el año pasado, atribuida principalmente a la falta de inversión y a la inestabilidad que generan las políticas arancelarias impuestas por Estados Unidos.
“En los últimos meses hemos recibido diversas quejas y denuncias de nuestros afiliados sobre el impacto que han tenido las medidas arancelarias. Aunque no hay un número específico de proyectos detenidos, la caída en la actividad es evidente: hoy estamos 32 por ciento abajo respecto al año anterior, la reducción más drástica de los últimos siete años”, explicó.
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El dirigente empresarial subrayó que la incertidumbre económica ha frenado la llegada de nuevos capitales al país, lo que repercute directamente en la generación de obras.
“No se está invirtiendo en México lo que debería invertirse, y eso nos pega de lleno a quienes dependemos de proyectos de infraestructura”, sostuvo.
Asi mismo, hizo un llamado al Gobierno Federal para redoblar esfuerzos en las negociaciones con Estados Unidos, país al que responsabilizó en gran medida de la situación actual.
“Nuestras autoridades están haciendo lo posible, pero mientras nuestro vecino del norte siga presionando con aranceles, la confianza se verá afectada y la inversión no llegará”, advirtió.
Finalmente, reiteró que la CMIC continuará insistiendo en que se generen condiciones favorables para detonar proyectos productivos, pues de lo contrario, dijo, la contracción podría prolongarse y dejar secuelas más graves en la economía del estado y del país.