Tras las medidas arancelarias implementadas por el gobierno de los Estados Unidos desde el mes de junio, México se mantiene en la búsqueda de nuevos mercados, siendo los propios productores del país vecino los más afectados, ya que en productos como el maíz se analiza adquirir este grano de Argentina o Egipto.
El economista Gustavo Puente Estrada explicó que México ha tomado las medidas necesarias y acertadas para mantener su economía y actividad comercial con el menor impacto negativo posible, y la respuesta con aranceles entre el 5 y 25 por ciento son conforme a la medida de los impuestos a México a algunos metales.
Pese a los esfuerzos que se hacen para mantener los lazos comerciales con el país del norte, reconoció que la incertidumbre radica en la toma de decisiones precipitadas del mandatario del Ejecutivo de los Estados Unidos, que a la fecha ha destacado por encabezar una lucha comercial no sólo con México, sino con la propia Unión Europea.
"El problema es que tenemos un vecino que continúa peleando con todo mundo, y hemos tenido conflictos que nunca se habían tenido", agregó.
Como parte de las medidas a las que México ha recurrido es buscar nuevos aliados, refirió que un ejemplo de esto y de lo que podría ocurrir con demás productos es el caso del maíz; en el 2017 México importó 15.5 millones de toneladas de maíz de los Estados Unidos y actualmente se evalúa la posibilidad de comprarlo a Argentina o Egipto.
"Nos va a salir más barato de Argentina o Egipto porque hay un arancel del 20 por ciento, esos norteamericanos ya están molestos con su gobierno y la Unión Europea no está contenta tampoco, El 80 por ciento de nuestras exportaciones van a Estados Unidos", finalizó.
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apl