Durante los últimos meses, los distribuidores de frijol han percibido un incremento en el consumo de este producto, lo cual atribuyen a los ajustes económicos que han sufrido los bolsillos familiares a causa de reducción de salarios, pérdidas de empleo, entre otros efectos a causa de la contingencia sanitaria.
Carla Cristina Cabanillas Santamaría, distribuidora de frijol en San Luis Potosí, narró que desde abril a la fecha, se incrementó hasta un 70 por ciento la demanda de este grano de consumo básico para los mexicanos.
Con la permanencia de los niños y jóvenes en casa por la suspensión de clases presenciales, así como la incorporación del home office, las familias duplicaron y en algunos casos hasta triplicaron la cantidad de frijol que habitualmente consumían.
"Antes había familias que compraban uno o dos kilos de frijol para llevarse en su despensa, y en estos meses, hemos observado que se están llevando cinco o hasta 10 kilos, para que les rinda", añadió.
Este producto, además de ser de los favoritos en las cocinas mexicanas, tiene un costo accesible, lo cual ha sido un "alivio" para que las familias puedan transitar en medio de la crisis.
“La gente definitivamente lo que busca es frijol y arroz como base. Yo creo que también es por la economía, porque sí estamos muy mal en eso, hay mucha gente sin trabajo, y pues tienen que consumir productos de primera necesidad, y uno de los básicos es el frijol”, detalló.