El outsourcing o subcontratación se ha vuelto más popular para las empresas, pues ha proporcionado una forma para que los fundadores y empresarios deleguen sus tareas de reclutamiento a un tercero.
Las empresas subcontratistas o de outsourcing brindan servicios a empresas para contratar personal que trabaje dentro o fuera de la empresa que lo contrate.
La subcontratación es un proceso que transfiere recursos y responsabilidades al cumplimiento de ciertas tareas a un tercero.
De acuerdo con la empresa Labor Mexicana, el outsourcing o tercerización es la práctica de obtener bienes y servicios de un proveedor extranjero. Esto se usa más en industrias donde hay escasez de mano de obra para puestos particulares o donde el costo de la mano de obra es demasiado alto. Por ejemplo: desarrolladores de software o diseñadores.
También nos explican que con el auge del sector tecnológico y el ecosistema de las startups, el outsourcing se ha convertido en una ventana de oportunidad para que las empresas adquieran y retengan talentos así como equipos de desarrollo cuando la oferta de desarrolladores no es suficiente para satisfacer la demanda.
Labor Mexicana nos dice que las empresas subcontratan porque reducen sus gastos generales en sus operaciones diarias, lo que aumenta los márgenes de beneficio.
El outsourcing puede ser una estrategia muy útil para los márgenes de ganancia de una empresa y para fines de productividad.