Panificadoras no prevén un descenso en precios para el pan dulce el próximo año, además, por el aumento sostenido en los principales insumos como el trigo y no haber podido recuperarse económicamente tras la pandemia, las pequeñas panaderías se han visto obligadas en cerrar de forma definitiva, informó Olivia Calderón Gómez, miembro de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa).
Calderón Gómez explicó que aproximadamente el 30% de negocios pequeños dedicados a la producción de pan dulce o tradicional ha tenido que cerrar por la falta de solvencia, “la mayoría de las panaderías son negocios familiares y al no tener la capacidad económica para costear el aumento de insumos ha provocado su quiebre”, explicó.
Esto también se debe a que muchas panificadoras ya se encontraban “lastimadas” a consecuencia de lo que sufrieron durante la pandemia, pues entre otras cosas les afectó el recorte de horarios durante la crisis sanitaria, en especial las mañanas que es el mejor horario para la venta de sus productos, así como de 7 a 9 de la noche, pero por reajuste de horario y cierre anticipado de negocios no esenciales, se redujo hasta un 30% sus ingresos durante esos días de restricciones.
En cuanto a las panificadoras que han logrado sostenerse hasta ahora, la Canainpa asegura que ha mantenido un precio aceptable considerando el panorama que les dejo la pandemia y ahora el incremento y desabasto de la materia prima. El costo para la producción de una pieza de pan aumentó un 50%, pero su precio a la venta a lo mucho subió un 20% su costo.
“Realmente el precio del pan no ha subido tanto en comparación al aumento que hemos tenido de insumos. Por el conflicto entre países la harina nos llega a cuentagotas”, expresó Olivia Calderón.
La venta principal de estos establecimientos son el pan dulce y la venta del bolillo, pero la temporada de Día de Muertos y el clima frío durante la época invernal de diciembre, representa una de las mejores temporadas para repuntar sus venta con otros productos más elaborados y con los que obtienen mayor ganancia, como lo son el pan de muertos o la Rosca de Reyes.
“Gracias a las tradiciones aumenta la venta, se vende mucho en Reyes, pero la tradición mexicana y picardía es el Día de Muertos”.
Hay pan de muertos relleno, de chocolate o que tiene una elaboración creativa en su presentación colocando materiales que simulen la ceniza o con adornos de colores morados o el color del cempasúchil que pueden venderse hasta los 14 pesos por pieza.
Finalmente Olivia Calderón habló a favor del consumo de pan, refiriendo que está “satanizado” al acusarlo de que engorda, pero desde su opinión es el estilo de vida de las personas lo que causa problemas de salud crónicos como la diabetes o la obesidad, por lo que invitó a perderle el miedo a su consumo diario.