A pesar de que la Cuarta Transformación prometió que el turismo será un derecho de todos los mexicanos, en los primeros meses del gobierno de Andrés Manuel López Obrador han disminuido los viajes de los connacionales en el país.
Cifras del Sistema de Monitoreo Datatur de la Secretaría de Turismo(Sectur) muestran que los viajeros mexicanos alojados en los hoteles del país disminuyeron a 17 millones 607 mil entre enero y abril del presente año, 503 mil visitantes menos que durante el periodo similar de 2018.
Se trata de la primera vez que desciende el turismo doméstico desde 2011 en un primer cuatrimestre, cuando entonces se redujo en 411 mil viajeros en los 44 principales destinos de México.
El director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac, Francisco Madrid, ha detectado que los mexicanos y las empresas han sido cautelosos, ya sea viajando menos, reduciendo su gasto y haciendo traslados más cortos, mientras otros turistas están llegando a establecimientos no convencionales mediante las autodenominadas plataformas online, tipo Airbnb y HomeAway.
El académico también reconoció que los funcionarios del gobierno pueden estar viajando menos, ante los recortes presupuestarios por la política de austeridad de la Cuarta Transformación.
En febrero pasado, el titular de la Sectur, Miguel Torruco, anunció el programa Sonrisas por México para fomentar que la población de escasos recursos y grupos vulnerables viajen de manera gratuita por el país, como parte de su derecho universal al descanso y a la recreación, asegurando que “el turismo será un derecho de todos”.
El secretario también lanzó el programa Disfruta México para establecer acuerdos con touroperadores y socios estratégicos nacionales para ofrecer paquetes turísticos de bajo costo, con el fin de fortalecer el mercado interno.
Sin embargo, más de la mitad de los 44 principales centros turísticos del país recibieron menos mexicanos desde que inició la actual administración, entre los que destacan Acapulco, donde llegaron 216 mil visitantes menos que hace un año, y la Ciudad de México que registró una disminución de 165 mil viajeros connacionales.
Le siguen Veracruz y Boca del Río, cuyos hoteles alojaron 142 mil mexicanos menos, continuando con León y Monterrey, de acuerdo con cifras de la Sectur.
“Es crítico que esté cayendo el consumo turístico de los mexicanos, porque representa 75% del consumo total [en la materia] en México”, opinó Francisco Madrid, quien fue subsecretario de operación turística de la Sectur en el sexenio de Felipe Calderón.
La semana pasada, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que el gasto efectuado por los mexicanos en sus viajes dentro del país se redujo 2.8% en el primer trimestre del año con respecto al mismo lapso de 2018, siendo la caída más pronunciada desde la crisis internacional de 2009.
En cambio, el turismo de los extranjeros se incrementó 9.5% y significó el mayor aumento en los últimos dos años.
Con relación al programa Sonrisas por México, el académico de la Universidad Anáhuac dijo que cualquier esfuerzo para impulsar la demanda interna es bien recibido, pero se debe valorar la conveniencia de subsidiar otro tipo de consumos antes que el turístico.
“Me gustaría que todos hiciéramos válido el derecho a viajar, pero hay otros derechos que estarían antes que el turismo, como salud, educación, vivienda, trabajo y seguridad”, explicó.
El año pasado, los turistas mexicanos gastaron más de 2 billones de pesos durante su desplazamiento y estancia en el país, de acuerdo con información de la Sectur.