En este último mes la Asociación Mexicana de Profesionistas Inmobiliarios (AMPI) ha registrado un incremento de un 15 por ciento en la actividad inmobiliaria, principalmente en el arrendamiento de casas. El presidente de este organismo empresarial, Heriberto González, explicó que las cuentas tanto para renta y venta llevan todo un proceso y no siempre se concretan de forma inmediata.
Asimismo, informó que el mayor porcentaje de cierre de contratos son para el arrendamiento, pues cerca del 60 por ciento de las operaciones obedecen a este rubro mientras que el otro 40 son referentes a la venta de casas.
“Del flujo de llamadas que se reciben en la inmobiliaria, el 60 por ciento son de renta de vivienda y el 40 por ciento de compra, si hablamos de que se pudieron haber movido alrededor de 10 mil viviendas por necesidad, a lo mejor Infonavit consume seis mil por necesidad de desplazamiento, entonces quedan cuatro mil y de esas la mayoría son de renta. Entonces a lo mejor unas dos mil 500 casas se rentan en todo el estado y unas mil 500 se venden a través de los bancos u otros créditos como Fovissste”, ahondó el líder inmobiliario.
Y es que a decir del empresario, aunado al déficit de vivienda para enriquecer la venta de la misma, existen otros factores que influyen para tomar este tipo de decisiones, desde el costo, plan crediticio, ubicación, entre otros aspectos conforme a las necesidades del interesado para finalmente decidirse a realizar la operación.
