Operbes, filial de Televisa, deja de controlar el 100% de sitios de la red NIBA para que sea Uninet de Telmex quien brinde conectividad en más del 90% de los sitios.
En 2016, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) informó que pagó 187 millones 556 mil pesos a Operbes para la conectividad de la Red NIBA (Red Nacional de Impulso a la Banda Ancha), cifra superior a los aproximadamente 100 millones de pesos que se pagará a Telmex, Totalplay y Televisa para dar continuidad al programa.
Hasta principios de 2016, CFE Telecom ofrecía el servicio de enlaces de larga distancia de la Red NIBA, sin embargo, con la nueva Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, se realizó una licitación donde Operbes resultó ganadora.
Por tres años y medio, la filial de Televisa ofreció servicios de internet de hasta 10 Gbps en mil 300 sitios, entre instituciones de educación superior, centros de investigación, grandes hospitales y otros edificios relevantes de dependencias públicas federales y estatales.
Entre las instituciones que usan el servicio de la Red NIBA se encuentran el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), El Colegio de México, el Instituto Politécnico Nacional (IPN), el ISSSTE y el IMSS, entre otras.
En la nueva licitación realizada este mes, se conectarán mil 257 sitios con una inversión por parte del gobierno de 95.6 millones de pesos para un periodo de un año, donde Telmex conectará mil 166 puntos por la cantidad de 72.5 millones de pesos, Totalplay enlazará 86 sitios por 19.4 millones de pesos y Televisa cinco lugares por 3.7 millones de pesos.
Elizabeth Peña Jáuregui, abogada experta en telecomunicaciones, destacó que debe garantizarse la continuidad en la prestación de los servicios a pesar de que sean empresas distintas las que vayan a ofrecer la conectividad a estudiantes, profesores e investigadores.
“Debe existir una continuidad de los servicios, ahora son tres empresas distintas con diferentes posturas, por lo que la empresa que deja la totalidad del servicio a la siguientes debe garantizar que no se afecte a la comunidad con una transición bien cuidada pues ahí es donde puede haber un riesgo”, señaló Peña Jáuregui.
Por otra parte, la experta pidió que haya más transparencia en este tipo de licitaciones ya que en este caso no se informó sobre la asignación y no pudo dar seguimiento a las propuestas de cada empresa participante en el concurso.
Sin embargo, destacó que tener a tres compañías dando la conectividad indica que hay mayor competencia.
“Si bien Televisa tenía la prestación del servicio, esto genera competencia entre los actores del mercado”.
Por su parte, Jorge Bravo, analista de Digital Policy and Law, indicó que las empresas tienen la tarea de demostrar que serán eficientes dando el servicio.
Sobre la duración de un año que tiene el nuevo contrato, comentó que puede tener un trasfondo político de manera que cada año concursen las empresas y los competidores no cuestionen la licitación, dando posibilidades a todos de participar.
También es posible que la nueva administración busque que la empresa estatal en telecomunicaciones sea quien brinde el servicio en el futuro.