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La iniciativa de la presidenta Claudia Sheinbaum para establecer un límite al precio de la gasolina en México de 24 pesos ha generado incertidumbre entre el sector empresarial.
Luis Gerardo Ortuño, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en San Luis Potosí, advirtió que la propuesta presenta desafíos significativos debido a la influencia del mercado global y el impacto en las finanzas públicas.
El dirigente señaló que los costos del combustible en el país dependen de factores internacionales, como el precio del petróleo y la cotización del dólar, lo que hace difícil fijar un monto máximo sin generar efectos colaterales.
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"El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) representa una carga fiscal importante que incide en el precio final que los consumidores pagan en las estaciones de servicio", explicó.
Ortuño alertó que la única vía por la cual el gobierno podría intervenir en el precio de la gasolina sería mediante subsidios, lo que implicaría destinar recursos federales que, de otra forma, podrían emplearse en otras necesidades del país.
El líder empresarial expresó su preocupación por las consecuencias fiscales de esta medida, ya que para mantener los costos bajo control, la administración federal tendría que asignar una parte de sus ingresos a subsidiar el precio del combustible, reduciendo así la disponibilidad de fondos para sectores como infraestructura, salud y educación.
"Debemos recordar que en 2018, el expresidente Andrés Manuel López Obrador asumió el cargo y aseguró que los precios de la gasolina disminuirían; sin embargo, la realidad ha sido distinta, pues en varias regiones del país el litro de combustible cuesta mucho más de lo que dijo y la tendencia al alza ha sido constante en los últimos años", puntualizó.
Ortuño insistió en que, en lugar de imponer topes de precios, el gobierno debería enfocarse en mejorar la infraestructura de refinación, optimizar la distribución del combustible y promover el uso de energías alternativas que reduzcan la dependencia del petróleo importado.
Finalmente, el presidente de Coparmex exhortó a la administración federal a realizar un análisis profundo antes de implementar esta medida, considerando tanto su impacto en el mercado como en el presupuesto público. También instó a que se fomente un diálogo abierto con el sector privado para encontrar soluciones que permitan estabilidad en los precios sin comprometer la inversión ni los recursos de la nación.
