Durante enero, la venta de vehículos ligeros nuevos fue de 104 mil 832 unidades, un 6% menos respecto a las unidades comercializadas en el primer mes de 2019, de acuerdo con cifras del Inegi y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Prácticamente todas las automotrices registraron una caída en ventas, excepto Hyundai que incrementó 7.8% sus ventas; JAC 46%; Peugeot un 10.6%; Renault 15.6%; Suzuki 4%; y Volkswagen 2.4%.
Y entre las marcas de lujo, Mercedes Benz incrementó un 8.6% sus ventas; Subaru un 66%; Audi un 10.8%; y Volvo un 21.4%.
Las dos marcas con el mayor volumen de ventas: Nissan y General Motors registraron una caída de 10% y 10.2%, respectivamente.
Mientras que Toyota, KIA y Honda retrocedieron 9.3%, 3.2% y 4.4%, respectivamente.
Guillermo Rosales, director general adjunto de AMDA, comentó que el primer mes del año 2020 mantiene la tendencia negativa vigente desde junio de 2017, hilvanando con ello 32 meses con resultados adversos en el mercado de vehículos ligeros nuevos.
“Los factores negativos que influyeron mayormente en 2019 en el mercado automotor se mantienen presentes: desconfianza empresarial que propicia caída en la inversión y con ello se frena la creación de empleos formales, principalmente disminuyendo aquellos con los ingresos necesarios para adquirir un vehículo nuevo, estimándose esto a partir de 5 salarios mínimos”, indicó.
Ante este panorama es necesario generar las condiciones políticas y económicas necesarias para recuperar la inversión y la capacidad de consumo en México.
En lo inmediato es necesario aplicar un Programa de Fortalecimiento del Mercado Interno Automotor, coordinando acciones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la banca de desarrollo y la Secretaría de Economía.
Asimismo, es urgente frenar la introducción de vehículos de contrabando, por lo que la AMDA solicitó la intervención del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador para combatir el contrabando de vehículos.
Rosales Zárate pidió al gobierno federal que establezca los mecanismos de coordinación política con el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, con el objeto de terminar con su iniciativa de regularización de vehículos de contrabando a partir de una iniciativa de Ley presentada al Congreso del Estado.
De continuar los estímulos para la introducción de contrabando se continuará agravando la crisis del sector automotor, dijo Rosales Zárate.