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El caso de La región salvaje, cuyo estreno fue frenado inicialmente por la cadena Cinemex y que luego reconsideró tras la presión en redes sociales, no es nuevo en México.
Existen títulos que aún antes de su lanzamiento generaron controversia mediática e interés entre el público potencial de las historias.
EL UNIVERSAL presenta el recuento de algunas de ellas:
- El crimen del Padre Amaro: Impulsada sin quererlo por Jorge Serrano Limón, de Provida, por decir que era una blasfemia y lastimosa para la iglesia católica. Al final 4.5 millones de espectadores la vieron en México y compitió por el Oscar en la categoría de Mejor Película en Lengua Extranjera.
- La ley de Herodes: Estrenada cinco meses antes de las elecciones presidenciales del 2000, la cinta intentó ser frenada por el entonces titular del Imcine. El instituto, de acuerdo con Luis Estrada, director del filme, intentó comprarle su parte para que no fuera exhibida y según sus ofertantes, no afectara el proceso electoral.
- El espinazo del diablo: Horas antes de su entreno en octubre de 2001, la cadena Cinemark decidió retirarla de su programación. A la empresa se le habían destinado 30 pantallas para la producción de Guillermo del Toro, quien en ese momento mostró su despreocupación, aduciendo que la gente interesara la vería donde fuera.
- Japón: La relación sexual entre una mujer de la tercera edad y un hombre mucho menor que ella causó conmoción en Cannes 2002 y luego en México en su estreno. Con ella ganó Carlos Reygadas una mención especial en el certamen francés.
- El infierno: De la oficina de la Comisión del Bicentenario salió una copia del filme días antes de su estreno en salas. En la gota de agua vista a lo largo del filme en el dvd apócrifo, se veía el nombre del organismo gubernamental.
-Y tu mamá también: Hasta el 2000 los criterios para otorgar clasificación a las película no eran claros. Un reclamo de Alfonso Cuarón y el productor Jorge Vergara, hoy dueño del equipo de futbol Guadalajara, por tener la letra C, sólo para mayores de 18 años, abrió la discusión. Desde entonces cada letra otorgada se ciñe a criterios públicos.
-La sombra del caudillo: Se filmó en 1959, se congeló un año después y pudo ser estrenada tres décadas después. La película basada en la novela de Martín Luis Guzmán abordaba la política mexicana con su corrupción y componendas. Marcó el “suicidio” cinematográfico del cineasta Julio Bracho, a quien desde entonces, recuerda su hija la actriz Diana Bracho, mucha gente de cine le dejó de hablar y de contratarlo.
-Rojo amanecer: Mostrar lo sucedido la noche del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco y la aparición en una escena del ejército, fue suficiente para que la cinta fuera enlatada por medio año en RTC, que no deseaba dar autorización de la misma para su exhibición. Las negociaciones llegaron hasta Carlos Salinas de Gortari, entonces presidente de México, quien tras verla autorizó el lanzamiento, siempre y cuando quitaran dos diálogos y la escena con los militares. Mutilada, se estrenó meses después.
vkc
