“¡Está muerta! ¡Está muerta!”, fueron los gritos de la asistente que encontró a Demi Lovato inconsciente en su cama, tras sufrir una sobredosis.

De acuerdo con “TMZ”, un guardaespaldas fue clave para salvar la vida de la cantante estadounidense.

El guardaespaldas sabía que estaba ante una emergencia cuando entró a la habitación y vio a la asistente alterada y gritando que Demi estaba muerta.

Cuando entró al lugar, vio que Demi no estaba respirando y algunas fuentes dicen que había sangre en la cama y vómito, por lo que sus vías respiratorias podrían haber estado obstruidas.

El guardaespaldas le aplicó primeros auxilios para que pudiera respirar y cuando llegaron los equipos de emergencias, le suministraron a Demi un tratamiento para revertir los efectos de la sobredosis.

Hasta hace unos días no había fecha para dar de alta a Lovato.

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