Algo más de cien personas han firmado una petición en Internet para que se impida la visita de Roman Polanski a la escuela de cine de Lódz (centro de Polonia), de la que el prestigioso director francopolaco fue alumno, después de la nueva acusación de violación contra el cineasta que se ha hecho pública este mes.
"Nosotros, los estudiantes, empleados y ex alumnos de la Escuela de Cine de Lódz, exigimos que se cancele la visita de Roman Polanski a la escuela programada para este sábado (día 30 de noviembre)", dice la petición, promovida a través de diferentes redes sociales.
Polanski estará esta noche en Lódz, donde asistirá a la apertura del festival de cine Cinergia para presentar su nueva película "Yo acuso", y mañana tiene previsto una visita a su antigua escuela de cine, donde se reunirá en un coloquio con estudiantes y profesorado.
La visita ha generado malestar entre algunas personas vinculadas a la Escuela de Cine, al entender que las últimas acusaciones que se han vertido contra el cineasta hacen que su visita "suponga una falta de respeto para todos aquellos que han sido víctimas de comportamientos violentos", dice el documento que se opone a esta visita.
La polémica rodea desde hace décadas al célebre director, que sigue siendo prófugo de la justicia estadounidense tras ser acusado en 1977 de haber mantenido relaciones sexuales con Samantha Geimer cuando ésta tenía 13 años.
A eso se suma la acusación de violación que el pasado 8 de noviembre hizo la fotógrafa francesa Valentine Monnier, quien relató que en 1975 fue forzada por Polanski cuando ella tenía 18 años.
Monnier, cuyas acusaciones se suman a las de otras mujeres en los últimos años, no ha presentado ninguna denuncia por estos hechos, ya prescritos.
"La Escuela de Cine de Lódz, como cualquier otra institución educativa, debe ser un lugar donde se debe condenan sin paliativos los comportamientos sexuales violentos", añaden los firmantes que se oponen a la visita de Polanski.
Desde esta escuela se ha intentado quitar hierro al asunto, y se recuerda que la asistencia al encuentro con Polanski, "un artista maravilloso con una dilatada experiencia", es "voluntaria".